Discos de gramófono no se rinden a los discos compactos
Vivimos en la época de los discos compactos, no obstante, hay gente que considera su sonido como demasiado artificial y sigue prefiriendo los viejos discos de gramófono. El mayor fabricante de tocadiscos clásicos a nivel mundial tiene su sede en la ciudad de Litovel, en Moravia.
La empresa SEV Litovel fabricó el año pasado 32 mil tocadiscos, la mayoría de los aparatos se vende en mercados mundiales. La firma exporta tocadiscos a 70 países, incluso a Japón, aunque la empresa nipona Sony es una de las pocas que no han suprimido la fabricación de gramófonos, como lo hicieron por ejemplo Philips ó JVC.
A diferencia de otras empresas, la compañía checa no se especializa en la fabricación de tocadiscos especiales para los DJ´s. Sus productos son destinados a los aficionados al sonido análogo clásico que escuchan los discos en casa. Numerosos melómanos tienen grandes colecciones de discos de vinilo, incluyendo álbumes que probablemente jamás serán reeditados, así que tienen interés por comprar nuevos tocadiscos, explican los expertos.
Se trata de cierta nostalgia, el manejo de un tocadiscos es como un ritual, y además, algunas personas prefieren el sonido más plástico de los discos de gramófono, aunque éste incluya ruidos y crujidos, agregan los fabricantes.
Los discos compactos actualmente dominan en los mercados musicales, pero a la vez vuelve a aumentar la producción de discos clásicos. Por ejemplo, la empresa GZ Digital Media fabricó el año pasado 80 millones de discos compactos, pero por otro lado, su producción de discos de gramófono alcanzó cuatro millones y medio de piezas, es decir, 700 mil discos más que el año anterior.
En concordancia con esa tendencia, dicha empresa incluso lanzó al mercado "discos híbridos", o sea discos compactos, cuya superficie superior imita la de los discos de gramófono teniendo ranuras para el captador de sonido.