Escolares checos salen de vacaciones
Para los adultos este viernes es un día común y corriente. Pero para los escolares es una fecha especial, puesto que finalizó el año académico y comenzaron las vacaciones de verano.
Estudiantes de la escuela Na Smetance, de la capital checa, compartieron con Radio Praga sus impresiones y sentimientos.
“Recibí excelentes notas. Pero la verdad es que me esforcé bastante porque mi hermano es un buen estudiante y yo no quiero ser peor. Además, tuve una gran motivación porque nuestros padres nos prometieron llevarnos de vacaciones a Egipto, lo que siempre ha sido mi gran sueño”, indicó Kristýna.“Tengo notas estupendas. Hasta yo misma me siento gratamente sorprendida. No esperaba lograr tan buenas notas en química ni en ciencias naturales que, para decir la verdad, no son mis materias preferidas. Por lo tanto estoy convencida que mis padres me han preparado alguna sorpresa”, afirmó Bárbara.
“El año pasado recibí notas mucho mejores. Empeoré, sobre todo, en matemáticas. Mis padres no se alegrarán mucho. Por este motivo no espero regalo alguno, más bien me espera una conversación poco agradable”, dijo Adéla.
Los psicólogos recomiendan a los padres de los estudiantes que recibieron malas notas conservar la calma y no atemorizar ni castigar a los niños. Advierten ante las reacciones poco premeditadas de los menores que pueden huir de casa o recurrir incluso al intento de suicidio.
Sobre todo, los padres deberían meditar bien si no son exageradamente exigentes con sus hijos, sostuvo Renata Vargová, del centro psicológico ‘Seguridad Infantil’, de Praga.“Los padres deberían acordarse de sus años escolares y reconocer si ellos fueron siempre estudiantes ejemplares. Les recomendaría evitar reacciones inadecuadas y castigos físicos. También que sigan con mayor atención el proceso educativo de sus hijos para evitar futuras sorpresas negativas”, señaló Renata Vargová.
Las vacaciones escolares de verano durarán dos meses. Los alumnos volverán a los pupitres el uno de septiembre.