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Una vez firmado el Tratado empezó la tormenta de amenazas. Washington y Praga acordaron la construcción de una estación de radares del sistema de defensa antimisiles de EE. UU. en suelo checo.
Todavía no se había secado la tinta en el documento y el Kremlin empezó a amenazar con tomar medidas de represalia, pero checos y estadounidenses han insistido hasta la saciedad que se trata de un sistema defensivo que no apunta contra Moscú ni contra nadie.
La secretaria de Estado estadounidense sostuvo que este acuerdo era un hito que respondía a las necesidades propias y de sus aliados para la defensa ante un enemigo común.
“Este es un acuerdo que nuestros aliados de la OTAN apoyan, como trascendió en la pasada cumbre de Bucarest, porque la defensa antimisiles hoy en día apunta contra aquéllos que nos amenazan a nosotros. Le hemos explicado a las autoridades rusas que todos enfrentamos amenazas de estados como Irán, que continúa trabajando en misiles de largo alcance y nosotros debemos estar en una posición para responder”.
Pero la verdad es que el futuro del proyecto es todavía incierto. El emplazamiento del radar estadounidense en territorio checo no es aceptado por la población, según los últimos sondeos de opinión pública, que muestran cerca de un 70 por ciento de rechazo. En el mismo momento en que Rice firmaba el acuerdo con los checos, miles de ciudadanos protestaban en las calles contra el mismo.
En Praga queda prohibido a partir de este lunes beber alcohol en algunas plazas y calles céntricas, en algunos parques y jardines públicos, en las cercanías de las escuelas, campos infantiles y paradas de metro, entre otros.
“La policía municipal aplicará sanciones financieras principalmente contra personas que vuelvan a infringir la normativa. Además, tomará en cuenta si la respectiva persona disturba el orden público o no, etc. En la mayoría de los casos suponemos que simplemente la expulsará del lugar donde está prohibido consumir alcohol”.
La portavoz agregó que la policía no cuenta con aplicar sanciones financieras contra los turistas, a los que informará sobre la nueva normativa.
“Antes de que la normativa entrase en vigor, hicimos una campaña medial e informamos a las agencias de viaje, así que esperamos que los turistas se enteren de la prohibición. Naturalmente, el policía que pille a un turista bebiendo alcohol en las respectivas zonas, no lo multará de inmediato, sino que lo hará abandonar el lugar donde queda prohibido consumir alcohol”.
La República Checa dio este martes el primer paso para ingresar en la Agencia Espacial Europea. El primer ministro checo, Mirek Topolánek, se reunió con el director de la Agencia, Jean-Jacques Dordain, para firmar el acuerdo de adhesión del país a esta organización intergubernamental. Según Jan Kolář, director de la Oficina del Cosmos Checa, dicho acuerdo abre las puertas a la participación de los científicos checos en el programa cósmico europeo.
Ingenieros de materiales, productores de electrónica y programadores podrán participar en la investigación espacial, dedicada, por ejemplo, a la exploración de Venus y Marte. Los checos incluso tendrán la oportunidad de ingresar en el cuerpo europeo de astronautas, destacó Jan Kolář.
“A partir de ahora, cualquier ciudadano checo que cumpla con los requisitos solicitados podrá presentarse como candidato a ingresar en el cuerpo europeo de astronautas”, señaló Kolář.
La Agencia Espacial Europea es una organización intergubernamental, que se ocupa de la exploración del espacio. Fue constituida en 1975 y actualmente cuenta con 17 estados miembros. Es uno de los principales líderes mundiales de la investigación cósmica, junto con Estados Unidos, Rusia y China.
Karel Hála fue una figura inconfundible en el escenario musical checo. Este cantante siempre elegante fue valorado por la crítica por su voz y excelente sentido para el ritmo, que hizo de él uno de los mejores intérpretes del swing en la historia de la República Checa. La cantante Helena Vondráčková lamentó su muerte y expresó que Karel Hála fue un intérprete fenomenal.
“El ritmo circulaba en sus venas. El público lo sentía y disfrutaba sobremanera de sus conciertos. Escuchar a Karel Hála cantar el swing fue un verdadero placer”, declaró Vondráčková.
La muerte de Karel Hála significa una gran pérdida para la música checa, afirmó la cantante Marta Kubišová. “Fue un intérprete sin parangón en este país. Me fascinaba la ligereza y a la vez perfección absoluta de sus interpretaciones. Además, Hála disponía de una voz única”, dijo Marta Kubišová.
Karel Hála se mantuvo medio siglo en el firmamento de la música pop checa. Después de terminar el Conservatorio Musical de Praga, inició su carrera como cantante en musicales y operetas. Actuó en importantes escenarios de Praga, como Rokoko y el Teatro Musical de Karlín.
