El 40 por ciento de los apartamentos en Praga son habitados por una sola persona
El número de ciudadanos checos que viven solos aumenta bruscamente en los últimos años. La peor situación se registra en Praga, donde casi el 40 por ciento de los hogares son habitados por una sola persona.
Esto se debe, en parte, al envejecimiento de la población del país. De acuerdo con la estadística, la mitad de los que viven solos son personas jubiladas, mayores de 60 años.
Por otra parte, crece el número de jóvenes que prefieren vivir sin pareja. Martin Potůček, director del Centro para las Estrategias Sociales y Económicas, de la Universidad Carolina de Praga, explica las razones de este fenómeno.
“La sociedad checa no favorece la vida familiar. Durante muchos años, la familia estuvo fuera de los intereses políticos. La situación mejoró levemente en los últimos cinco años, pero aún así, se les da más importancia a los éxitos individuales. Comprar vivienda y tener hijos en Chequia resulta tan costoso que mucha gente renuncia a ello”, opina el sociólogo.El mayor número de hogares unipersonales, el 38,5 por ciento, se registra en Praga. Dicho de otra forma, uno de cada cinco ciudadanos capitalinos mayores de 15 años vive solo. La situación acá es comparable con la de los países escandinavos. En Dinamarca o Finlandia, por ejemplo, dos de cada diez jóvenes de 20 años viven solos. Por su parte, en Italia, es sólo uno de cada 100.
Pero mientras que los escandinavos no tienen mayores problemas a la hora de comprar alimentos o electrodomésticos para una sola persona, en Chequia es casi imposible. Grandes dificultades existen también en los servicios, recalca Martin Potůček.
“Se registra una importante escasez de centros preescolares que permitan a los jóvenes regresar pronto a su trabajo. También existen reservas en la atención a las personas mayores. Creo que los recortes presupuestarios, planeados por el Gobierno, tendrán consecuencias fatales para el sector social”, indica el experto.
En el futuro se puede esperar otro aumento de personas que vivan solas y no sólo entre los jubilados. Será cada vez más frecuente que los jóvenes, después de abandonar la casa de sus padres, vivan solos durante algún tiempo y sólo después compartan el hogar con su pareja, opina Ondřej Nývlt, de la Oficina de Estadística.