Grupo PPF compra filial checa de Telefónica
El multimillonario Petr Kellner del Grupo PPF compró el 65,9% de la filial checa de Telefónica, el mayor operador de telefonía móvil del país. La empresa española inició la venta de activos con el fin de reducir todavía este año su deuda neta.
Ahora el multimillonario checo Petr Kellner y su Grupo PPF firmaron la compra del 65,9% del capital de Telefónica República Checa por un importe en efectivo de unos 2.467 millones de euros que incluye el 100% de la filial Telefónica Eslovaquia.
Para el analista de la empresa Cyrrus, Tomáš Menšík, se trata de uno de los mayores negocios logrados en el país y lo catalogó como ventajoso para el grupo nacional.
“PPF adquiere al líder de la telefonía móvil del país. La filial de Telefónica es una empresa prácticamente sin deudas, lo que es muy favorable y no debemos olvidar que dispone de cinco millones de clientes”.
El pago inicial para el cierre de la transacción será de 2.063 millones de euros y una cantidad aplazada de 404 millones de euros se cubrirá en los próximos cuatro años.
La transacción debe recibir todavía el visto bueno de la Comisión Europea y de los organismos de regulación, pero los expertos estiman que todo está en regla y en el lapso de unos pocos meses se finiquitará el negocio.
La decisión de vender la filial checa responde al proceso de reestructuración puesto en marcha por Telefónica en el verano del 2012.
El proceso de desinversiones llevado a cabo por la empresa española ha tocado también a cuatro países de Centroamérica: Guatemala, El Salvador, Nicaragua y Panamá. Telefónica acordó la venta del 40% de sus activos en la zona al grupo guatemalteco Corporación Multi Inversiones (CMI) por cerca de 371 millones de euros.
La venta de activos de Telefónica se extendió a China, donde la empresa, en el verano de 2012, vendió el 4,56% del capital de China Unicom, segunda operadora del gigante asiático, por cerca de 1.100 millones de euros.
Todo esto forma parte del proceso de recorte de la deuda de Telefónica que alcanza cifras millonarias. Según fuentes del mercado, una vez cerrada la venta de la filial de Chequia la empresa cumpliría con su objetivo de situar la deuda por debajo de 47.000 millones a finales de 2013.