El presupuesto estatal checo registra el primer superávit en más de dos décadas
El año 2016 fue un año muy bueno para el presupuesto estatal, que terminó con un superávit de 2.287 millones de euros. Este es el mejor resultado desde la fundación de la República Checa en 1993. La última vez que los ingresos excedieron los gastos fue en 1995, lo cuál supone un logro para el ministro de finanzas Andrej Babiš. No obstante, los críticos afirman que este éxito no puede atribuirse únicamente al ministro.
Los economistas señalan que son muchos los factores que han influido en el resultado. Los líderes del partido de la oposición, como Petr Fiala del Partido Cívico Democrático, criticaron la interpretación del resultado en Twitter, diciendo que un superávit alto no significa una buena gestión económica. Recordó a los usuarios de Twitter que el Gobierno no había invertido, no había hecho un buen uso de la financiación europea y no había bajado los impuestos.
El primer ministro Bohuslav Sobotka, por su parte, sugirió que el Gobierno en su conjunto había desempeñado un papel clave, no sólo reclamando fondos de la UE, sino también impulsando el crecimiento económico y mejorando las cifras de empleo. Durante mucho tiempo, el crítico y rival de Andrej Babiš, la cabeza del partido TOP 09 Miroslav Kalousek, dijo que el superávit en el presupuesto del año pasado fue el resultado de factores extraordinarios que no atribuyó al actual Gobierno, opinando que este no había invertido de manera efectiva.