El periodista debe servir siempre a la verdad (primera parte)
Con este nuevo espacio, "Del Totalitarismo a la Democracia", Radio Praga trata de ofrecer un vistazo sobre lo que ha representado el proceso de transición en la República Checa. Este espacio está dedicado a todas las personas interesadas en conocer detalles sobre la transformación checa desde la dictadura comunista hasta la democracia, por lo que creemos que encontraremos muchos radioescuchas en Cuba, donde importantes sectores de la población se preparan también para un proceso de cambio pacífico en la Isla.
La situación de los medios de comunicación en la Checoslovaquia comunista y la transformación de los mismos en la República Checa democrática tras la derrota del totalitarismo. Con Jiri Hosek, redactor jefe de la Redacción Internacional de la Radiodifusión Checa, conversa Freddy Valverde.
Quién dominaba los medios de comunicación en Checoslovaquia antes de la derrota del comunismo?
"En aquella época todos los medios de comunicación estaban controlados por el Estado comunista, con excepción de aquellos medios que transmitían desde fuera del país, como por ejemplo la Voz de América o Europa Libra".
Quiénes trabajan entonces en los medios de comunicación controlados por el Estado comunista?
"Por supuesto que se trataba de periodistas vinculados con el sistema, miembros del Partido Comunista y en muchos casos también de la Seguridad del Estado. Resulta curioso que los comunistas quisieron crear entonces la sensación de cierto pluralismo mediático. Además de Rudé Právo, que era el órgano del Partido Comunista y el de mayor tiraje y difusión, existían dos periódicos más, uno "Svobodne Slovo" del Partido Socialista y el otro "Lidová Demokracie" del Partido Popular, que no eran otra cosa que la prolongación del dominio comunista. Así que antes del año 1989 no existía libertad de prensa, y la prensa no era independiente".
Si los periodistas se encontraban vinculados al régimen comunista, y éste dominaba los medios de comunicación, quién se hizo cargo de los medios de comunicacción después de la derrota del comunismo en 1989?
"Si, aquí topamos con una situación muy curiosa, ya que después de 1989 nos dimos cuenta de que ante nosotros había un vacío enorme de buenos periodistas que no estuvieran vinculados con el régimen comunista. Es por ello que 15 años después de los cambios políticos topamos en la República Checa con muchos jóvenes en la dirección de los grandes medios de comunicación. Ante la falta de periodistas muchas veces se tomaba a periodistas inexpertos, pero en los últimos 15 años se ha notado un importantísismo cambio en cantidad y en calidad.
Me imagino que la situación surgida en los años 90, con pocos periodistas y sin experiencia resultó difícil?
"La falta de un significativo número de periodistas altmamente cualificados provocó que se viviera en una especie de "realidad virtual", porque los medios de comunicación no era críticos, no alertaban sobre una serie de anomalías políticas y económicas que tenían lugar en los primeros años de la transición. No fueron lo suficientemente críticos con los políticos de turno".
Y cómo caracterizaría la situación actual, quince años después de iniciados los cambios democráticos?
"Responderé con un ejemplo. En Gran Bretaña los medios de comunicación develan un escándalo político o económico, el tema aparece en las primeras páginas un días, dos, tres, cuatro o cinco, hasta que realmente los implicados respondan aclaren lo ocurrido y el caso pueda darse por cerrado. En la República Checa eso todavía no ocurre, los redactores jefe y los directores de los medios de comunicación insisten en la necesidad de un número mayor de temas nuevos. Eso significa que el escándalo en cuestión aparece el primer día en portada, el segundo en la segunda segunda página y el tercero en tercera, muchas veces desaparece sin coonocerse el desenlace, o el mismo se publica en un lugar de menor importancia."
Hasta aquí amigos esta primera parte de la entrevista con Jiri Hosek, redactor jefe de la Redacción Internacional de la Radiodifusión Checa. No se pierdan la segunda parte el próximo sábado.