La lucha contra el terrorismo mundial podría desembocar en la limitación de los principios democráticos
Estados Unidos se esfuerza por crear una amplia coalición mundial contra el terrorismo y busca apoyo para responder los ataques terroristas contra Washington y Nueva York. Zdenek Kríz, experto en asuntos de Seguridad de la Academia Militar de la metrópoli morava de Brno, destaca que depende mucho de quién integrará la alianza.
Zdenek Kríz sostiene que en cuánto a la participación en una operación militar de otros países europeos, todo depende de si Estados Unidos estará dispuesto a incorporarlos a sus maniobras y entregar todos los pormenores de lo que prepara. Si no es así, la ayuda de los aliados europeos se limitará al apoyo logístico y al de los Servicios de Inteligencia.
¿Podrá Estados Unidos contar con la ayuda del mundo árabe?
"El espacio de maniobra de la elite política del mundo árabe se ve restringido. Estados Unidos no goza de mucha popularidad en esos países y los círculos políticos deben tomar en consideración la voz de la opinión pública. La ayuda de algunos países árabes, como Egipto, Paquistán o Arabia Saudí, podría desembocar en la desestabilización de los regímenes de esos Estados".
¿Cuáles serán las formas de la lucha contra el terrorismo mundial?
"El Gobierno de Estados Unidos tiene que pensar muy bien cuáles objetivos políticos pretende conseguir con su contraataque. Si desea capturar a los autores de los ataques terroristas, primero debe concluir las investigaciones. Si pretende tranquilizar a la opinión pública de su país, basta con bombardear las bases de Talibán. Si quiere castigar a Osama Bin Laden, sería oportuna una operación rápida, limitada y secreta de sus servicios de Inteligencia con el fin de capturarle o liquidarle. Pero si Estados Unidos quiere luchar contra el terrorismo mundial, es necesario que modifique su política exterior para con los países en cuyo territorio operan grupos terroristas".
Zdenek Kríz subraya que en este caso, Estados Unidos debe tratar de persuadir a los gobiernos de dichos países que ellos mismos luchen contra los terroristas.
"Este objetivo es muy ambicioso y no estoy seguro de que Estados Unidos esté preparado, ni dispuesto. Lo único que en este momento puedo decir es que tan sólo las amenazas, las sanciones y los ataques militares contra los países que en su territorio abrigan a los terroristas, no bastarán para acabar con el terrorismo. Estados Unidos tiene que buscar nuevos aliados también fuera de la civilización occidental".
El experto en asuntos de seguridad de la Academia Militar de Brno, Zdenek Kríz, advierte sobre un grave peligro en la lucha contra el terrorismo: la limitación paulatina de los derechos cívicos y los principios democráticos. Puede llegarse a aplicar sofisticados sistemas para el control de los ciudadanos y cederse un gran espacio para los Servicios Secretos, lo que sin duda restringirá la libertad de los ciudadanos.