Milos Zeman sobre la Central Electronuclear de Temelín
El Primer Ministro checo, Milos Zeman, no reaccionará a las exigencias del Gobierno de Austria que quiere condicionar las deliberaciones sobre la entrada de la República Checa en la Unión Europea con la puesta en marcha de la Central Electronuclear de Temelín.
En rueda de prensa ofrecida por Milos Zeman en Havíøov durante su visita laboral a Moravia del Norte, el presidente del Gobierno checo resaltó que el problema será solucionado en los próximos quince días paralelamente con la puesta en marcha del primer reactor de la Central de Temelín. "Al problema se puede contestar con palabras o hechos. Prefiero los hechos, y por lo tanto supongo que las preguntas pendientes serán respondidas en el curso de las próximas dos semanas," dijo Zeman.
Según informaciones previas, la puesta en marcha de la Central Electronuclear de Temelín debería efectuarse entre el 10 y el 15 de septiembre. Al compás de la aproximación de la fecha de la activación del combustible nuclear en Temelín se intensifican las protestas de políticos austríacos y organizaciones ecologistas contra la planta electronuclear.
Austria, preocupada por eventuales problemas de seguridad, protesta contra la Central de Temelín desde hace varios años. Pese a las declaraciones del Gobierno checo sobre el funcionamiento infalible de la Central, los austríacos insisten en que la planta de Temelín no corresponde a los parámetros de la Unión Europea.
Por su parte, los ecologistas denuncian que en Blahutovice, Moravia del Norte, se prepara la construcción de una nueva central electronuclear. Según explicara Milos Zeman, los ciudadanos de Blahutovice no deberían sentirse preocupados por una realidad virtual. Hasta el año 2030 en el territorio de la República Checa no se construirá ninguna central electronuclear, resaltó el Primer Ministro checo, agregando que el reactor de Temelín asegurará al país suficiente energía eléctrica, por lo menos, para los próximos veinte años.
