Martin Kasík, las notas musicales se impusieron a la aritmética

Martin Kasík, el renombrado pianista checo es un gran aficionado al ajedrez. De niño se vio cautivado por las matemáticas, pero las notas musicales se convirtieron en la pasión de su vida, y lo han llevado a los grandes escenarios del mundo. Confiesa ser admirador de Horowitz y sus compositores predilectos son Bach, Beethoven y Bach.

Martin Kasík, foto: Presentación oficial de M.Kasík

Martin Kasík siempre quiso tocar piano ante los más diversos públicos. Actualmente reconoce que el Premio para Jóvenes Artistas que obtuvo en 1999 fue muy importante para darse a conocer, para abrirse paso en el mundo de los grandes escenarios.

Después de ese vinieron más premios, como por ejemplo el premio Harmony en 2002, pero el galardón de Nueva York fue el impulso que necesitó en aquel momento el joven virtuoso. Parte del premio fue la representación del pianista por la agencia YoungConcertArtist.

Con la experiencia de los años, Martin Kasík, reconoce que para un artista novato semejante agencia desempeña un papel fundamental, porque el pianista quiere y debe tocar, no tiene tiempo ni los contactos necesarios para organizar eventos.

Tocando con su abuelo

Martin Kasík empezó a tocar piano a los cuatro años de edad. Cursó estudios en el Conservatorio de la ciudad de Ostrava y posteriormente en Praga.

Martin Kasík, foto: Presentación oficial de M.Kasík

La música formó siempre parte inseparable de la vida familiar. Ninguno se dedicó de manera profesional, pero con gusto recuerda que su abuelo tocaba diez instrumentos musicales. En varias ocasiones tocaron juntos en el seno familiar, él tocaba el piano y el abuelo el violín.

De niño disfrutaba cantando canciones folclóricas, que le ayudaron a descubrir el encanto de la improvisación. Antes de decidirse por completo por la música, Kasík vaciló con las matemáticas, pero al final las notas se impusieron ante los números.

Una de las grandes distracciones de Martin Kasík es el ajedrez. En una entrevista para la Televisión Checa (ČT) sostuvo que se trata de un juego, de un deporte, fascinante en el que encontramos tensión, emociones y mucha concentración. Algo similar se puede palpar durante un concierto de piano.

Comparte con su esposa su amor por Bach

Martin Kasík, foto: Presentación oficial de M.Kasík

En algunos conciertos a Martin Kasík le acompaña su esposa. Se trata de algo poco visto entre los músicos checos. Kasík explica que es muy cómodo. Su esposa y él estudiaron piano con los mismos profesores tanto en Ostrava como en Praga y comparten el mismo gusto musical y disfrutan interpretando a Bach.

Al referirse a los cambios que han sufrido los intérpretes debido a las tendencias o a la globalización de la que no se escapa la música clásica, Kasík sostiene que curiosamente la perfección es un elemento predominante en la actualidad. Esto significa que algunos virtuosos del pasado tendrían dificultades para cumplir con algunas exigencias del momento.

Entre sus pianistas preferidos destaca Vladimir Horowitz, para él uno de los dioses del piano, mientras que Chopin, Beethoven y Bach son sus compositores predilectos.