Lubomír Brabec

Y retomamos hoy el tema de los testimonios presentes del legado musical checo.

Están escuchando el concierto en Do mayor de Antonio Vivaldi, que con la Orquesta de Cámara de Praga grabó el famoso guitarrista checo Lubomír Brabec, concertista de renombre mundial que será el protagonista de este programa.

Desde su más temprana infancia Lubomír Brabec tocaba el violín, y fue a los 13 años que optó por la guitarra. Inició los estudios en el Conservatorio de Pilsen, metrópoli de Bohemia Occidental, y posteriormente los continuó en el de Praga con el profesor Milan Zelenka, con el cual, todavía como estudiante, se presentó en muchos conciertos. Recién graduado en 1974, Lubomír Brabec se dio a la pedagogía y a la carrera de concertista.

El primer éxito lo alcanzó aquel mismo año, cuando se adjudicó el primer premio del célebre concurso mundial de guitarra, de París. Y en 1980 obtuvo una beca de la Academia Real de Música de Londres, en la que, además del laúd, estudió interpretación de música barroca y renacentista europea.

Tras concluir aquellos estudios y regresar a su patria, Lubomír Brabec grabó un disco con composiciones españolas para guitarra, que le haría ganar el premio "Escudo de Oro" por el larga duración de música clásica más vendido en la Checoslovaquia de entonces. Y de ese disco les ofrecemos a continuación un fragmento de "Leyenda", del compositor y guitarrista español Isaac Albéniz. Lubomír Brabec realizó una serie de giras por Japón, varios países latinoamericanos y Estados Unidos en la década del 80. En aquella oportunidad el crítico musical del periódico "Los Angeles Times" escribió sobre él: "Brabec es uno de los guitarristas más brillantes del mundo".

Con motivo del centenario del nacimiento del compositor brasileño Heitor Villa-Lobos, en 1987, Brabec grabó un disco con los "Cinco Preludios" y "Doce Estudios" de ese magnífico representante de la música folclórica de Brasil. A la complejidad de las composiciones se refirió el célebre guitarrista Andrés Segovia -a quien el autor había dedicado las dos obras mencionadas- en los siguientes términos:

"Si Villa-Lobos, gran conocedor de la guitarra, eligió estas formas y digitación para resaltar la audacia de las frases, debemos respetar estrictamente su deseo, incluso al precio de tener que esforzarnos al máximo en la técnica y en el orden de la interpretación". A Lubomír Brabec le gusta la ópera, la música sinfónica y la popular. Con su amigo Karel Wagner -también compositor checo- grabó en 1988 el disco "Metamosfosis", interesante colección de composiciones clásicas adaptadas para los géneros pop y rock. Del disco, que tuvo mucho éxito en la Checoslovaquia de entonces y en muchos otros países europeos, escucharán a continuación la Danza ritual del fuego, de Manuel de Falla, en arreglo de Jan Hála. Entre los galardones recibidos por Lubomír Brabec en lo que va de su carrera artística figura un Disco de Oro por la venta de más de 300 OOO ejemplares de un álbum con temas barrocos, neoclásicos, románticos y contemporáneos, entre los que destacan piezas de compositores españoles y latinoamericanos.

En 1989 Lubomír Brabec grabó un disco con motivo del 80 aniversario de la muerte del compositor español Francisco Tárrega. El álbum termina con la "Gran Jota", de significado especial para este país pues era una de las composiciones más tocadas por los aficionados a la guitarra en la Checoslovaquia de postguerra. En otro disco de Brabec podemos escuchar dos conciertos de Joaquín Rodrigo: el Concierto de Aranjuez, y Fantasía para un gentilhombre. Estas compsoiciones -que son consideradas por Brabec las más hermosas de todas las que se han escrito para guitarra- las grabó el guitarrista checo con la Orquesta de Cámara de Praga como homenaje al 90 cumpleaños de Joaquín Rodrigo.

De lo dicho se desprende que la actividad artística de Lubomír Brabec está estrechamente relacionada con España, país por el que realiza giras todos los años. Y con el Concierto de Aranjuez finaliza en Radio Praga esta edición de Legados del Pasado-Testimonios del Presente dedicada al famoso guitarrista checo Lubomír Brabec.

Autor: Mónica Villegas Gallego
audio