Los seguros funerarios echan raíces en Chequia

Foto: Filip Jandourek

El sector funerario va en aumento en la República Checa. Entre los servicios cada vez más contratados se encuentran los seguros funerarios, que no tienen una larga tradición entre los checos.

Foto: Filip Jandourek
Realizar un funeral no resulta ser un asunto barato en la República Checa, por lo cual cada vez más checos contratan un seguro funerario. En la mayoría de los casos se trata de mujeres que se han quedado solas y no quieren molestar a sus familiares con los gastos del entierro.

La póliza que ofrecen las compañías aseguradoras en la República Checa se basa en los mismos principios que un seguro clásico, con la diferencia de que se contrata a tiempo indefinido y concluye con la muerte del cliente. Otra cláusula impone que el asegurado tiene que ser mayor de 50 años de edad. Un seguro funerario sale aproximadamente a unos 40 céntimos de euro al día.

Contratar un seguro funerario no tiene una tradición larga en la República Checa, ya que la primera compañía aseguradora ofreció este servicio en 2009.

Foto: Barbora Kmentová
El ahorro a largo plazo representa otra posibilidad para la financiación del funeral. La ceremonia además se puede pedir con varios años de antelación, según afirma el presidente de la Asociación de Funerarias, Jaroslav Mangl.

“Funciona como una cuenta anticipada. Se organiza el funeral, se escoge el ataúd, se escribe la esquela y el cliente deja allí su traje. En cuanto la funeraria se entera de la muerte del cliente, parte inmediatamente allí y actúa según el testamento del fallecido”.

El precio de un funeral con ceremonia ronda los 900 euros. Sin el acto ceremonial, el precio se puede rebajar hasta llegar a unos 360 euros. Ese es uno de los motivos por qué los checos a menudo omiten la ceremonia, prosigue Mangl.

Foto: Filip Jandourek
“La República Checa tiene varias particularidades. Somos el número uno en los funerales sin ceremonia, esto no existe en ningún país europeo. Los funerales en otros países europeos pueden llegar a costar entre 4.000 y 10.000 euros. Por eso todo el mundo en estos países está asegurado”.

El negocio en el sector funerario se encuentra en aumento. En la República Checa operan actualmente cerca de 400 funerarias, que cada año tramitan unos 90 millones de euros. Con este sector enlazan también otros negocios como como canterías, carpinterías, floristerías, sastrerías, o hasta fábricas de desinfectantes.