Los demócrata cristianos abandonan el Gobierno

Desde derecha: Miroslav Kalousek, Cyril Svoboda, Jan Kasal y Milan Simonovský (Foto: CTK)
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El democristiano Partido Popular decidió abandonar la coalición gubernamental y someter al Gobierno checo a un voto de censura.

Stanislav Gross,  al fondo Miroslav Grebenicek  (Foto: CTK)
La conferencia nacional del democristiano Partido Popular recomendó la dimisión de los tres ministros populares. Los populares están dispuestos a sumarse al Partido Cívico Democrático en el voto de censura al Gabinete previsto para este viernes. El motivo principal de tal actuación es el desacuerdo con el primer ministro checo, Stanislav Gross, por el que arrancó la crisis gubernamental debido a sus dudosas aclaraciones sobre los negocios poco transparentes de su familia. El jefe del Ejecutivo, sin embargo, ya está preparado para la dimisión de los ministros populares.

"Voy a barajar otros nombres para los puestos de ministros. Supongo que dentro de poco podré indicar los nombres correspondientes, que luego presentaré al Presidente de la República para que los confirme" informó Stanislav Gross.

Los populares siguen creyendo que la mejor opción es mantener la coalición gubernamental con los socialdemócratas y los unionistas, pero con un primer ministro diferente.

De izquierda:Milan Simonovský,  Jan Kasal,  Cyril Svoboda y Miroslav Kalousek.  (Foto: CTK)
El Partido Social Demócrata se propone continuar con el programa electoral de la coalición gubernamental, aunque sus representantes no ven con buenos ojos la actitud de los populares.

"Me parece muy raro que los populares en dos días hayan cambiado de socio coalicionista y de opinión sobre un gobierno que sigue cumpliendo con el programa en cuya aceptación ellos mismos tomaron parte" comentó el vicepresidente de la Socialdemocracia, Jirí Paroubek.

Para obtener la moción de confianza, el Gobierno actual deberá recibir 101 votos de los diputados, disponiendo el Partido Cívico Democrático y los populares de tan sólo 78 votos, mientras que el resto de la coalición cuenta con 81 votos. Para la eventual dimisión del Gobierno serán decisivos los 41 votos de los comunistas, que ya se reunieron con el primer ministro Gross. Sin embargo, la cooperación con los comunistas es rechazada por algunos ministros socialdemócratas, que están dispuestos a abandonar sus cargos si la Socialdemocracia depende del apoyo comunista.