Los castores arreglan en dos noches lo que el gobierno no fue capaz de hacer en siete años

En el área natural de Brdy, un grupo de unos ocho castores ha restablecido humedales desaparecidos, creando un hábitat para muchas especies y ahorrando millones al Estado, que llevaba años intentando obtener los permisos necesarios para hacer una presa muy parecida a la construida por los roedores.

En la República Checa pueden encontrarse muchas poblaciones de castores. Mientras que en algunos sitios complican la vida a los agricultores, ocasionando con sus diques el desborde de los ríos y la inundación de campos de cultivo, en otras zonas son bienvenidos, ya que sus labores incluso ahorran millones a las arcas estatales.

Foto: Nature Conservation Agency of the Czech Republic

Así es, por ejemplo, en la zona natural protegida de Brdy, donde gracias a los diques construidos por los castores en el río Klabava, reaparecieron en sus cercanías humedales que habían desaparecido hace mucho a raíz de la actividad del hombre. Existían planes para la revitalización de esa zona y los castores, sin saberlo, asumieron su realización, creando unas condiciones perfectas para cangrejos de río, ranas y otras muchas especies.

Una obra de una o dos noches, sin burocracia y a coste cero 

En esa zona viven entre seis y ocho castores. El administrador del área protegida, Bohumil Fišer, considera que su número no cambiará demasiado, ya que sus crías suelen abandonar el territorio de sus padres y buscan uno nuevo para vivir. El primer castor apareció en Brdy en 2020. Los protectores de la naturaleza descubrieron entonces un gran número de sauces talados por los dientes de estos roedores. A partir de entonces su población en el lugar fue creciendo paulatinamente, así como sus obras en el río Klabava. Gracias a sus diques surgió allí un sistema de pequeñas lagunas, charcas y un gran humedal. La convivencia del castor con los humanos trae mutuos beneficios.

Foto: Nature Conservation Agency of the Czech Republic

Lo cómico del caso es que la República Checa llevaba siete años planificando la construcción de una presa bastante similar a la que han levantado estos castores. Entre los múltiples beneficios de la obra estaba también evitar inundaciones en zonas bajas del río en épocas de lluvia.

El proyecto, de alrededor de 1,2 millones de euros, se fue retrasando, como a menudo sucede, entre burocracia y pleitos por cuestiones de propiedad e indemnizaciones de las que los castores no entienden.

Sin pedir permisos ni esperar a recibirlos, los castores tardan entre una o, como máximo, dos noches en construir una presa como la del río Klabava que, además, se ha demostrado ya lo suficientemente sólida y efectiva.

Un caso semejante registran en la región de Olomouc, de acuerdo con Pavel Šošolík, de la administración regional.

“Podemos decir que nuestra coexistencia con los castores no es nada problemática. Por el contrario, ese roedor trae muchas cosas positivas a la región. En primer lugar, retienen el agua en el paraje y, en general, todo está en armonía”.

La labor del castor en esa región la aprecia también Petr Lojka, director del Departamento del Medio Ambiente del Ayuntamiento de Olomouc.

Foto: Hans Braxmeier,  Pixabay,  Pixabay License

“Considero que el castor aquí tiene de todo y, además, nos ayuda con sus diques a revitalizar la naturaleza. Aquí tiene suficiente comida, agua y tranquilidad, así como buenas condiciones para su reproducción. Además, los habitantes de la región de Olomouc quieren mucho a los castores locales, entonces ¿por qué ese animal iría a buscar otro sitio para vivir”?

Los castores no siempre son bienvenidos  

Sin embargo, en otros lugares no es así. Por ejemplo, en la región de Pardubice, al noreste de Praga, los diques del castor causan inundaciones de terrenos agrícolas locales, como dijo a la Radio Checa Michal Pešata, del Departamento de Protección de la Naturaleza de la región de Pardubice.

“Evidenciamos problemas relacionados con el castor sobre todo en la zona de Lanškroun, que es la más poblada por ese animal en la región de Pardubice. Evidenciamos allí muchas quejas de los agricultores locales, porque con sus diques en los ríos el castor ocasionó la inundación de entre 15 y 17 hectáreas de tierras agrícolas. Por otro lado es algo natural de los castores construir enormes diques en los ríos talando árboles para ello, lo que impide el flujo normal del agua”.

Como agregó para la Radio Checa Tomáš Sígl, del mismo centro administrativo de la región de Pardubice, debido al crecimiento de la cantidad de castores en la zona y los daños ocasionados, se hizo necesario adoptar ciertas medidas contra ese animal.

Foto: Nature Conservation Agency of the Czech Republic

“Así es y, en vista de que el castor es un animal protegido por ley, solicitamos en 2024 a los órganos competentes una excepción a la normativa de protección, a fin de poder regular su población local. Esa excepción es válida hasta finales de 2028. En algunos casos fue necesario intervenir de inmediato, porque los castores ocasionaron la inundación de grandes terrenos agrícolas, así como de algunas carreteras. La excepción a la normativa nos permite hacerlo”.

Sea como fuere, las administraciones públicas locales o de los ríos, deben informar con antelación sobre cualquier intervención contra el castor al  Gobierno Regional.

Autores: Ivana Vonderková , Marcel Faltys
palabra clave:
audio