La República Checa exige la protección de marcas y denominación de origen
La República Checa demanda ante la Unión Europea la protección de las marcas de sus productos alimenticios típicos, así como la denominación de origen. Sobre este tema delibera en Bruselas una delegación de negociadores checos.
La denominación de origen podrían utilizarla algunos productos checos como, por ejemplo, la cerveza de Smíchov, los pepinillos agrios de Znojmo y el popular queso de la ciudad morava de Olomouc.
Gran significado tendría una decisión positiva de la Comisión Europea para la cerveza checa Budweiser que mantiene un litigio contra la fábrica de cerveza norteamericana que vende sus productos en Europa bajo el nombre de Budweiser.
"Se trata de una marca registrada en muchos países europeos, sin embargo, la decisión de la Comisión Europea contribuiría a fortalecer nuestra posición en el mercado comunitario", dijo el director de la empresa checa, Jirí Bocek.
No obstante, la Unión Europea busca aún normas jurídicas firmes referentes a las denominaciones de origen y aún no fue determinado cuál será el proceder en caso de nuevos miembros de la Unión Europea. Resulta que se desconoce si en algún país europeo existe una marca registrada que incluye el nombre de alguna región de los países candidatos. Pues, en cuanto a las marcas, generalmente no se ponen límites algunos a la fantasía de cada uno.