La reconstrucción del castillo de Helfštýn recibe el Premio Checo de Arquitectura 2021
La reconstrucción del castillo de Helfštýn, llevada a cabo por Miroslav Pospíšil y Martin Karlík, se llevó el Premio Checo de Arquitectura 2021.
A 15 kilómetros al este de Přerov, en la región de Olomouc, se alza en una pequeña colina boscosa el castillo de Helfštýn. El monumento esconde una historia tan larga y convulsa como la de la propia Chequia. De hecho, en muchas ocasiones, estas han transcurrido cogidas de la mano. Helfštýn, establecido en el siglo XIII, fue reconstruido, asediado y cambió de manos y de propiedad infinidad de veces. Fueron, en definitiva, ocho siglos durante los que el castillo fue testigo y, a veces, protagonista del pasado checo.
Recientemente, el Instituto del Patrimonio Nacional sacó a concurso su reconstrucción. Los arquitectos Miroslav Pospíšil y Martin Karlík, del estudio Atelier-r, fueron los elegidos y, más tarde, los artífices de hacer realidad un proyecto que les ha valido el Premio de Arquitectura Checa de este año.
Los jóvenes arquitectos enfocaron el proyecto en tratar de crear un conjunto ecléctico, que combinase la tradición y el estilo original del lugar con una visión más moderna y actual. Así conectaron la planta baja con los niveles superiores dentro de los propios muros. También se agregaron una serie de terrazas que permitieran a los visitantes asomarse y contemplar el paisaje de la campiña morava que envuelve el Castillo. Otro de los grandes puntos del proyecto fue el trabajo que realizaron en el exterior, haciendo sus alrededores y accesos más transitables. Los galardonados se mostraron emocionados y compartieron sus impresiones.
“Lo primero que nos llamó la atención cuando miramos el proyecto fue que la luz entraba en las habitaciones en ruinas del castillo desde arriba. Intentamos mantener esta característica y eso se puede ver en los techos de vidrio que ahora cubren el castillo".
También en palabras del jurado, lo valiente de su propuesta fue muy valorado. Pospíšil y Karlík no cayeron en un simple trabajo de conservación, muy común en la arquitectura patrimonial, y decidieron ir un paso más allá. Jan Kasl, presidente de la Cámara Checa de Arquitectos, organización que otorga el galardón, se deshizo en halagos hacia los ganadores. También remarcó la importancia de ese enfoque innovador, que significó en buena parte que se alzasen con el premio.
“Personalmente, estoy muy contento, porque la arquitectura patrimonial a veces simplemente conserva. En este caso, los trabajadores del patrimonio parecían haber cooperado muy bien, porque hicieron posible incorporar una nueva adición al edificio histórico, que es completamente contemporáneo y con un diseño maravilloso. Si es posible agregar capas de nueva arquitectura en otros casos de reconstrucción de sitios patrimoniales, no creo que debamos preocuparnos por vivir en un museo al aire libre".
Este Premio de Arquitectura Checa busca promover y difundir los proyectos más granados de los profesionales del sector. En la edición de este año, por ejemplo, varios trabajos recibieron también distinciones honoríficas por parte del jurado. Es el caso de la reconstrucción del restaurante del Salón 17 de noviembre de la Facultad de Humanidades de la Universidad Carolina de Praga, a cargo de la firma Kuba & Pilař. También destacó el Centro Comunitario en la ciudad de Židlochovice, en Moravia del Sur, diseñado por el estudio Jura et consortes.
Atrás quedaron las escaramuzas suecas y danesas contra Helfštýn en plena Guerra de los Treinta Años o los tiempos en que el inexpugnable Castillo protegía a Moravia de la amenaza turca. Las labores de conservación de este se iniciaron a principios del siglo XX y para la década de los 70 se realizaban allí extensas investigaciones arqueológicas. Sin embargo, han tenido que pasar aún más de 30 años para que podamos disfrutar de este majestuoso lugar en su máxima expresión.