La RCh y la crisis en torno a Iráq

Radek Khol

La situación en torno a Iráq sigue siendo tensa. En el tablero de la política internacional se enfrentan dos opiniones. La postura en pro de la intervención militar contra el régimen de Saddam Husein, expresada por Estados Unidos. Y luego un amplio grupo de países, representados por Francia y Alemania, que abogan por una solución pacífica de la crisis iraquí. ¿Con cuál de estos dos bloques se alinea la República Checa?, Pavla Jedlicková conversa sobre ello con Radek Khol, experto en temas de seguridad del Ministerio de Relaciones Exteriores checo.

"La República Checa habla con dos voces en lo que a la tensión acerca de Iráq se refiere", destaca Radek Khol.

"La línea oficialista de la política exterior checa, representada por el Gobierno, el Ministerio de Asuntos Exteriores y el Parlamento, apoya por supuesto la posición común de la Unión Europea con su hincapié en el desarme de Iráq y el liderazgo de la ONU en cualquiera solución de la crisis iraquí. Sin embargo, ni los Quince son unánimes en su proceder en el caso de una intervención militar llevada a cabo por Estados Unidos sin el previo mandato de las Naciones Unidas".

¿Cuál es la segunda voz de Praga que Vd. mencionó?

"Son voces que se expresan en pro de un mayor compromiso en la defensa de los aliados concretos, como ha sido recientemente el caso de Turquía. Abogan también por una contribución más activa de la República Checa a la coalición internacional contra Saddam Husein, sobre todo con sus experiencias en la protección química y biológica. Se trata de opiniones que respaldan un procedimiento más duro contra Iráq y no se oponen al uso de fuerza para lograr el objetivo principal: destruir el arsenal iraquí de armas de destrucción masiva", dijo a Radio Praga Radek Khol, experto en temas de seguridad del Ministerio de Relaciones Exteriores de la República Checa.