La influencia de Babiš en el consejo de supervisión de ČEZ molesta a sus socios de coalición
La intervención del ministro de Finanzas checo, Andrej Babiš, en el consejo de supervisión del gigante energético del país, ČEZ, así como en el de otras tres empresas estatales, ha molestado a sus socios de coalición y ha desatado un conflicto que podría desestabilizar el Gobierno de centro-izquierda checo.
El ministro Babiš ha sustituido a siete de los ocho miembros del consejo de supervisión de la empresa energética ČEZ, una de las empresas más importantes propiedad del Estado.
Además, ha nombrado a los candidatos para los consejos de administración de otras tres empresas estatales: el grupo Aeroholding Checo, la compañía de oleoductos Mero ČR y el distribuidor de combustible ČEPRO.
Esto ha molestado a los socios de coalición del partido ANO. Al parecer, Babiš aprovechó el hecho de que ninguno de los candidatos presentados por los otros partidos habían sido aprobados por el Gabinete y eligió y presentó a sus propios candidatos en la reunión celebrada el viernes.El conocido periodista estadounidense Erik Best, radicado en Praga se pregunta cuál es la motivación exacta que ha llevado al ministro de Finanzas a realizar este cambio: si busca inculcar nuevas prácticas en la energética ČEZ para mejorar su funcionamiento o, por el contrario, pretende beneficiarse de su influencia como hombre de negocios para ampliar su poder en el ámbito nacional.
Entre los partidos más pequeños de la coalición, el lider del partido Democristiano, Pavel Bělobrádek, considera “raro” que la junta supervisora de una de las empresas más importantes del Estado esté controlada por los candidatos de un partido.Asimismo, otro funcionario del partido declaró que exigirá una explicación en la reunión programada para el miércoles en la que se verán las caras los líderes de los tres partidos que forman el Gobierno.