Hospital de campaña checo en Basora blanco de tiroteo casual
El Séptimo Hospital de Campaña checo dislocado en la ciudad iraquí de Basora fue blanco este miércoles de un tiroteo casual. Un paciente resultó levemente herido.
Varias balas cayeron casualmente en el lugar donde está dislocado el Séptimo Hospital de Campaña checo, afirma su comandante, el coronel Mojmír Mrva.
"La información sobre la muerte de dos hijos de Sadam Husein encontró una acogida tan cordial entre la población de Basora que todos celebraron disparando al aire. Varias balas cayeron sobre nuestro hospital, perforando dos cilindros neumáticos de la tienda, y una bala hirió levemente a un paciente".
El coronel Mrva informa que el hospital dispone de un sistema de defensa contra fuego directo. Los recintos médicos están ubicados en contenedores especiales que los protegen contra las balas perdidas.
Desde su apertura en mayo, el hospital de campaña checo atiende a unas sesenta personas al día. El hospital dispone de treinta camas y, según señala Mojmír Mrva, cada día hospitaliza a unos veinte pacientes.
"Tratamos, en primer lugar, las heridas de bala y las consecuencias del mal tratamiento previo de las fracturas. Hay diagnosis muy frecuentes, como las quemaduras, sobre todo de niños. En los hogares iraquíes escasea el gas y por eso utilizan combustibles líquidos para preparar la comida. Muy a menudo los niños vierten sobre sí recipientes con esos combustibles y se queman gravemente".
El Séptimo Hospital de Campaña checo ha recibido también a varios pacientes que se quemaron cuando lavaban su coche. "El agua es en Irak más cara que la gasolina y los habitantes prefieren lavar sus coches con gasolina que con agua. Y si encienden un cigarrillo, el siniestro está hecho", concluye el comandante del Hospital, Mojmír Mrva.