Grupo Visegrado busca facilitar las importaciones de gas procedente de EE.UU.

Foto: Tomáš Adamec

Cuatro países de Europa Central están intentando asegurar las importaciones de gas natural de Estados Unidos. En medio de la crisis de Crimea, los países miembros del Grupo Visegrado han hecho un llamamiento a los legisladores estadounidenses para facilitar las exportaciones de gas natural a la región para así disminuir su dependencia del gas ruso.

Foto: Tomáš Adamec,  Český rozhlas
El Grupo Visegrado, formado por Hungría, Polonia, República Checa y Eslovaquia, ha instado al Congreso estadunidense para relajar los obstáculos legislativos a la exportación de gas natural procedente de América. La petición fue realizada a través de una carta dirigida a John Boehner, presidente de la Cámara de Representantes de EEUU, y a Harry Reid, presidente del Senado.

La carta, elaborada por los embajadores en EEUU de los países miembros del Grupo Visegrado, argumenta que la competencia entre los proveedores de gas en Europa Central y del Este es un "aspecto vital de la seguridad nacional". Además, el escrito hace referencia a la situación actual en Ucrania y la compara con la Guerra Fría.

El Grupo pide la supresión de las barreras a la exportación de gas americano a los países que no disfrutan de acuerdos de libre comercio con EEUU, entre los que se encuentran Hungría, Polonia, República Checa y Eslovaquia. En este momento, las exportaciones de gas natural a esos países tienen que someterse a largos procedimientos de aprobación por el Departamento de Energía de EEUU.

Petr Gandalovič,  foto: Tomáš Adamec
Petr Gandalovič, embajador checo en los EEUU, sostiene que este acuerdo sería beneficioso para ambas partes. Por un lado, aumentaría la seguridad energética en Europa y, probablemente, también se produciría una disminución de los precios. "Al mismo tiempo, se crearían nuevos mercados para los exportadores estadounidenses. Es una situación en la que las dos partes se verían beneficiadas, y por eso hemos estado presionando desde hace varios años", explica Gandalovič.

La República Checa es muy dependiente del gas natural ruso. Cada año se consumen cerca de 8 millones de metros cúbicos de gas y dos tercios de esta cantidad provienen de Rusia. La actual crisis en Ucrania demuestra la importancia de una mayor diversificación de la oferta de gas en la región del este y centro europeo.