Estado checo controlará producción de explosivo plástico Semtex
La fábrica Explosia, en Bohemia del Este, productora del explosivo plástico Semtex, pasará a manos del Estado checo. El proyecto respectivo fue aprobado ayer por el Gobierno de este país.
La "nacionalización" de la fábrica Explosie, fue recomendada al Gobierno por el Consejo de Seguridad del Estado, con el objetivo de que la producción de ese peligroso explosivo plástico pueda ser controlada por el sector público. Por su parte, el consorcio Agrofert, en cuya propiedad se encuentra la fábrica Explosia, dio a conocer que sus proyectos de desarrollo no cuentan con la fabricación de explosivos en el futuro. El director general de Agrofert, Andrej Babis, señaló que la fábrica Explosie es una fábrica armamentista y que la nueva estrategia del consorcio supone una orientación distinta. Con ello surgió la inquietud de que el consorcio Agrofert podría proceder a la venta de la fábrica al extranjero o al cierre de la misma.
El cierre de la fábrica Explosie tendría consecuencias negativas, en primer lugar, para las Fuerzas Armadas checas, ya que la empresa es su mayor suministrador de explosivos. Además, con el cierre de la fábrica podría desaparecer o pasar a manos no autorizadas la documentación sobre diversos sistemas de armas, eventualmente también los datos técnicos para la fabricación del Semtex.
El Gobierno checo aprobó ayer la realización de la transacción, gracias a la que el Estado checo se hará acreedor de la fábrica Explosie a cambio de la anulación de la deuda que una de las filiales del consorcio Agrofert tiene frente a la Agencia estatal checa de Consolidación.
El ministro de Finanzas, Jirí Rusnok declaró que el objetivo principal de la transacción consiste en garantizar el control del Estado sobre la fábrica de municiones. Rusnok no descartó la posibilidad de que en el futuro se proceda nuevamente a la privatización de la fábrica, explicando que con mayor probabilidad la empresa sería ofrecida a algún productor de armas de países de la OTAN.