En lugar de cerveza, un nuevo centro cultural en Praga

Reavivar los abandonados recintos de la antigua fábrica de cerveza situada en el barrio Holesovice de Praga pretende un interesante proyecto, que acentúa el significado de la vida cultural en la capital checa.

Cuando hace dos año se cerraron definitivamente las puertas de esa cervecería - la más antigua empresa de ese tipo en Praga - nadie podía predecir el futuro que tendría el enorme recinto de más de siete hectáreas. Pero en esta época moderna no hay lugar para sentimentalismos y el que la empresa dejara definitivamente de producir el líquido espumoso, hay que tomarlo como un hecho real que responde a las necesidades de la reestructuración de la producción de cerveza en este país.

Al cabo de dos años del cierre de la cervecería, el recinto de Holesovice comenzó a cambiar. A pesar de que todavía no ha sido escogido el mejor proyecto para el futuro aprovechamiento de los terrenos, ya existen varias ideas y desde el pasado mes de septiembre, el recinto de la antigua planta de cerveza comenzó a cobrar vida.

También este tipo de música es posible escucharla actualmente en los recintos de la antigua cervecería de Holesovice. Mientras no sea aprobado el proyecto de futuro aprovechamiento del área, el lugar es utilizado para fines culturales por una asociación artística, encabezada por Alexandr Backovský, conocido artista checo especializado en diseños y arquitectura de interiores.

Desde entonces, en Holesovice tienen la posibilidad de presentarse especialmente, artistas jóvenes, sean cantantes, artistas plásticos o disenadores. También se celebran allí seminarios y encuentros con artistas de renombre mundial. Por ejemplo, en Holesovice dictó una conferencia el arquitecto francés, Jean Nouvel, autor de varios interesantes proyectos realizados en París, Praga y en otras ciudades de Europa. La idea de Alexandr Backovský y sus colaboradores es que los habitantes de Praga y los visitantes de la capital checa, se acostumbren a identificar el lugar con programas culturales, debido a que el proyecto del futuro aprovechamiento del área debería incluir también esa orientación.

Ya que mencionamos al arquitecto francés, Jean Nouvel, cabe decir que precisamente este artista, junto con otros colegas, asumió la tarea de elaborar un proyecto del futuro aspecto del área de la antigua fábrica cervecera de Praga - Holesovice. Aunque éste todavía no ha sido aprobado por las competentes autoridades checas, su concepto merece atención.

La idea consiste en conservar al máximo los antiguos edificios de la fábrica local, incorporándolos en construcciones modernas y creando de ese modo una interesante obra, llena de contrastes. El proyecto cuenta con un hotel, una sucursal bancaria, un aparcamiento subterráneo, un sinnúmero de tiendas, así como con diversos centros de servicios a la población. Sin olvidarse, naturalmente, del aprovechamiento de los futuros recintos para fines culturales.

A esta parte del proyecto se le dedica atención especial. Alexandr Backovský, explica: "El barrio de Holesovice ha estado sumergido en un letargo y nosotros queremos despertarlo de ese largo sueno." Por ello, incluso durante la realización de las obras de construcción, seguirán teniendo lugar en sus recintos programas culturales, especialmente de la corriente de cultura alternativa.

"Para que la tradición no se interrumpa y la gente se acostumbre a visitar el futuro centro cultural de Holesovice en forma regular", sostiene Alexandr Backovský.