El abuso de fertilizantes y pesticidas acarrea problemas en Chequia
La enorme cantidad de fertilizantes y pesticidas que emplean los agricultores en la República Checa ha empezado a generar graves problemas que se suman a la terrible sequía que ha empezado a castigar las tierras laborables del país.
El cambio climático y los períodos cada vez más frecuentes de sequía han provocado significativas alteraciones en el campo checo. Y en el último tiempo las malas noticias aumentan por el uso de grandes cantidades de fertilizantes y pesticidas.
“La cantidad de fertilizantes y pesticidas está aumentando de forma significativa. Hoy, llegamos a valores que son más altos que los de la agricultura socialista antes de 1989“.
Es sabido que durante el régimen comunista el abuso de fertilizantes y pesticidas se regía por intereses políticos, sin tomar en cuenta las eventuales consecuencias para los campos y la salud de la población.
De acuerdo con Datel, otro de los orígenes del problema responde al tipo de cultivos que han empezado a introducir los grandes consorcios.
“Tenemos cultivos que requieren altas dosis de fertilizantes y pesticidas. Por ejemplo, el maíz y la colza son cultivos que paradójicamente no necesitamos para la producción de alimentos, pero los agricultores los proporcionan a diversos sectores de la industria“.
Con el propósito de ayudar a reducir los problemas que afectan a una serie de países, la Unión Europea aprobó una directriz sobre zonas vulnerables para tratar de mejorar la situación en los campos más afectados. Si bien existen buenas intenciones, el experto checo Josef Datel dijo a la Radio Checa que, en lugar de disminuir, esas zonas aumentan.
En este momento la República Checa acusa la peor sequía de los últimos 500 años que afecta al 98% del territorio nacional. En algunas regiones la situación es crítica como en el sur y centro de Moravia, en el distrito de Olomouc, en el centro de Polabí y en el noroeste de Bohemia.
Toda el agua de aquí proviene de las lluvias, y precisamente en el sur de Moravia las precipitaciones han disminuido y las temperaturas han subido dejando menos agua en la superficie.
De acuerdo con Datel garantizar una cantidad suficiente de agua en el campo debe convertirse en una prioridad para el país. Considera que resulta indispensable captar y almacenar el agua de las lluvias, por ejemplo por medio de infiltración y de otras tecnologías existentes.
