Dieciocho personas murieron en las carreteras en Semana Santa

Dieciocho personas perdieron la vida en las carreteras durante la Semana Santa. Se trata de la mayor cifra en los últimos siete años.

Foto: ČTK

A pesar del gran operativo de la Policía de Tránsito, los accidentes mortales en las carreteras marcaron esta Semana Santa. Se duplicó el número de muertes en comparación con el año pasado.

El buen tiempo y la densidad del tránsito se sumaron a la indisciplina de muchos conductores temerarios, independientemente del número de efectivos en las carreteras asegura el oficial Tomáš Turek que participó en los operativos.

“Los controles se centraron sobre todo en el consumo de alcohol y el exceso de velocidad. Debo decir que a pesar de la cantidad de policías en las carreteras el número de accidentes mortales fue muy elevado”, indicó el oficial.

En la República Checa el buen tiempo juega un papel muy importante, el año pasado en Semana Santa las temperaturas no fueron muy altas ni hubo tanto sol, y eso se reflejó en el número de personas que viajaron en automóvil.

El buen tiempo atrae a los motociclistas y a los conductores menos experimentados, dos grupos altamente peligrosos en las carreteras, según indican los expertos.

La mayoría de los accidentes mortales, por no decir todos, respondieron esta Semana Santa a fallos de los conductores. Por razones desconocidas un automóvil en el que viajaba un matrimonio de edad avanzada cayó desde una gran altura a un río, ambos fallecieron.

El exceso de velocidad le costó la vida a un motociclista que perdió el control de su máquina y chocó contra un árbol y el conductor de un vehículo familiar se pasó al carril de dirección opuesta y colisionó con un camión.

Los debates en las redes sociales señalan que en las carreteras checas no se ven los policías de tránsito y que en los operativos de Semana Santa no ocurrió nada nuevo.

“Los policías se ocultan para castigar a los infractores, pero no funcionan como prevención”, indicó a la prensa un conductor anónimo, mientras que otro señaló que los policías se sitúan todos los años en los mismos lugares, así que la medida no ayuda mucho.

En la República Checa, la mayoría de los accidentes de tránsito se deben al exceso de velocidad, los conductores no respetan los límites establecidos, al tiempo que un alto porcentaje de choferes se comporta de manera agresiva en las carreteras.

Los políticos y los especialistas en seguridad vial no coinciden en qué sistema puede ayudar a reducir la indisciplina y agresividad de los conductores en las carreteras del país. Prácticamente cada nuevo Gobierno propone enmiendas a la Ley de Tránsito, pero el número de muertes en carretera no disminuye.