Llegué por primera vez a Radio Praga en el año 2009 y, gracias a ella, se me abrieron las puertas de una ciudad fascinante en la que terminé estableciéndome de forma definitiva.
Unos años después decidí cambiar de aires y probar otros ámbitos profesionales. Casi siempre desde Praga, trabajé para el Centro Checo de Madrid y empecé a traducir literatura checa, que son, a fin de cuentas, dos formas más de seguir conociendo este país hasta sus entrañas. Y también de llevar la vida o la cultura checa hasta España y Latinoamérica, que es lo que, en definitiva, hacemos en esta radio con tanta historia y tantas historias a sus espaldas.
Al final, la pasión periodística y el cariño por esta emisora han podido con todo, y en 2020 tuve la suerte de poder volver a Radio Praga Internacional para seguir contando a diario lo que sucede en la República Checa.