Comienzan su trabajo las primeras cinco asistentes sexuales de la República Checa
Los discapacitados de la República Checa cuentan ya con la posibilidad de aprovechar los servicios de las primeras asistentes sexuales del país. Se trata de prostitutas profesionales con la formación adecuada para cubrir las necesidades íntimas de las personas con discapacidad, asistir a las parejas y ofrecer información a los interesados y sus familias.
Previo pago de 45 euros la hora, la asistente puede no solo proporcionar unos momentos de placer al interesado, sino también romper los tabús existentes respecto al sexo de los discapacitados y enseñar a su cliente a hablar de sus necesidades, mostrar cómo utilizar juguetes sexuales o iniciar relaciones sentimentales. Pueden ayudar a las parejas con su vida sexual o incluso ofrecer asesoramiento a las familias.
“Organizamos para ellas cursos con la ayuda de nuestros socios internacionales, en concreto la organización suiza InSeBe y la pedagoga Catherine Agthe Diserens. Todos se dedican a la formación de asistentes sexuales en Suiza, así que organizamos cursos similares para nuestras futuras asistentes sexuales y también para cualquier persona dedicada a la sexualidad de las personas con discapacidad”.
Tras el periodo de formación, las mujeres firmaron un código ético y obtuvieron el certificado. Sus servicios los podrán disfrutar de momento solo los hombres, ya que aún no se cuenta con asistentes masculinos, reconoce Šídová.
El mayor obstáculo para la puesta en marcha del servicio ha sido la cuestión legal, ya que en la República Checa la prostitución no está regulada. Tras consultarlo con el Ministerio del Interior, la organización Placer sin Riesgo decidió no intermediar el trabajo de las asistentes sexuales, sino tan solo ofrecer una lista con sus contactos.
