Chequia y Eslovaquia acuerdan la convalidación de títulos universitarios
El primer ministro eslovaco, Robert Fico, firmó en una visita relámpago a Praga un acuerdo de reconocimiento de títulos universitarios entre los dos países. Durante su comparecencia ante los medios, Fico también se pronunció ante el ascenso de la ultraderecha en Eslovaquia.
Durante su visita a la República Checa, el primer ministro eslovaco, Robert Fico, firmó con su contrapartida checa, Jiří Rusnok, un nuevo acuerdo de convalidación de títulos que sustituye al anterior, inválido ya debido a los cambios legislativos introducidos en ambos países en los últimos años.
Se trata de un avance de importancia, sobre todo teniendo en cuenta que hay 147.000 eslovacos viviendo en la República Checa, muchos de ellos con un título universitario o estudiando para conseguirlo. Para muchos recién licenciados el mercado laboral sigue siendo checoslovaco, según afirma Jiří Halbrštát, de la agencia de personal Manpower.“Se trata sobre todo de eslovacos del centro y este de Eslovaquia, donde hay muy pocas oportunidades de trabajo. Y realmente les da igual si después de estudiar se trasladan a Bratislava o a Brno”.
Como novedad, los licenciados eslovacos ya no tendrán que pagar la tasa de 100 euros por el reconocimiento de su título checo. Fuera del acuerdo quedan algunas carreras que tienen su propia normativa, como medicina, odontología, enfermería o derecho. Tampoco se incluye la convalidación de los títulos de catedrático y profesor adjunto.Durante la rueda de prensa que siguió a la firma del acuerdo, Fico se pronunció acerca de la llegada al poder en la región eslovaca de Banská Bystrica del radical de ultraderecha Marian Kotleba. De acuerdo con el primer ministro eslovaco, la solución para hacer frente al extremismo es solucionar la cuestión gitana.
Fico propuso condicionar las subvenciones sociales a la realización de trabajos públicos, de manera que los gitanos que viven de las ayudas sociales tengan que poner algo de su parte y quitar razón así a los neofascistas, que hacen del tema gitano el centro de su discurso.El primer ministro checo, Jiří Rusnok, se mostró de acuerdo e indicó la necesidad de implementar medidas parecidas en el país, siempre que se haga de acuerdo con la Constitución. Hace unos años la vinculación de dotaciones sociales y trabajo público o formación no obtuvo el visto bueno del Tribunal Constitucional Checo.