Anežka Charvátová y Jana Chaloupecká dos protagonistas de la Revolución de Terciopelo
La hispanista y traductora Anežka Charvátová y la traductora Jana Chaloupecká vivieron hace 30 años en carne propia los dramáticos días de la Revolución de Terciopelo que acabó con el comunismo en Checoslovaquia.
A Jana Chaloupecká, el 17 de noviembre de 1989 la pilló de compras en la hoy desaparecida Alemania Democrática. Al volver a Praga se topó con calles tomadas por los estudiantes, huelgas en las universidades y en los teatros, y acto seguido se sumó a las manifestaciones que tenían lugar todos los días.
Un hito clave para Jana lo representó el día en que los obreros, uno de los pilares del régimen, le dieron la espalda al Partido Comunista y se sumaron a las protestas. De la mano con los estudiantes, los obreros de las grandes fábricas exigieron el fin del gobierno de un solo partido y al unísono pidieron libertad y democracia.
Treinta años después de la Revolución de Terciopelo, Anežka Charvátová y Jana Chaloupecká coinciden en que aquellos días y los primeros años revolucionarios fueron los mejores de sus vidas.
A manera de evaluación las dos indican que la libertad y la democracia son lo mejor que le ha ocurrido a su país, pero a la vez a una le inquietan la profundidad de las diferencias sociales, mientras que a la otra lo que identifica como neoliberalismo salvaje.
