Una exposición en Praga conmemora al padre de las lentes de contacto Otto Wichterle
Este año se celebra el centenario del nacimiento de Otto Wichterle, inventor de las lentes de contacto blandas y uno de los fundadores de la química orgánica macromolecular. Con motivo de dicho aniversario, la Academia de Ciencias inauguró este miércoles una exposición que conmemora a uno de los científicos checos más destacados de todos los tiempos.
“Aunque el profesor era un hombre muy informal, de inmediato provocaba respeto entre sus interlocutores. Muchas veces pude observar que las personas que lo vieron por primera vez se callaron para poder escuchar cuando él se puso a hablar. Él no daba mucha importancia a los trámites, era muy activo y enérgico. Siempre tenía prisa, nunca andaba con paso lento. Cuando empezaba a interesarse por algo, el interés se le notaba en la cara y contagiaba con su entusiasmo a todos los demás”.
Wichterle adquirió fama principalmente como inventor de las lentes de contacto, pero sacó a la luz también otra patente muy popular y útil: la primera fibra sintética de poliamidas, llamada silon, un material alternativo al nailon estadounidense.“En el mundo ha habido muchos inventores, pero pocos de ellos pueden jactarse de que su patente se convirtiera en un instrumento tan habitual de la vida cotidiana como el lápiz, el teléfono, o en este caso las lentes de contacto. Pero los que han leído las memorias de Wichterle saben que él es también autor de un método alternativo de la fabricación de poliamidas, conocidas en este país como silon. Se trata de una tecnología diferente de la utilizada por los estadounidenses durante la Segunda Guerra Mundial para fabricar el nailon 6. Esta nueva tecnología inventada por Wichterle posteriormente impulsó el surgimiento de la industria checoslovaca de poliamidas”, según resaltó Rypáček.
Después del golpe comunista en Checoslovaquia, Otto Wichterle se convirtió en víctima de las purgas realizadas por el régimen totalitario. En 1958, el experto fue despedido de la Universidad de Química. Tres años más tarde, el Gobierno decidió anular el desarrollo de las lentes de contacto. A pesar de las condiciones desfavorables, el científico no se rindió y llevó a cabo el proceso de su fabricación en casa mediante un aparato creado a partir de un juego de construcción para niños. Más tarde, gracias a la liberación parcial del ambiente político, Wichterle pasó a ser director del Instituto de Química Macromolecular. Sin embargo, ese cargo tuvo que dejarlo por razones políticas en 1969, después de la invasión de los Ejércitos del Pacto de Varsovia.“Wichterle fue una persona de gran renombre a nivel mundial, uno de los padres de la química macromolecular como rama científica. Fue un personaje excepcional también por su actitud moral y por su capacidad de organización, lo que demostró al fundar el Instituto checo de Química Macromolecular. En resumen, fue un personaje polifacético y respetado”, indicó Rypáček.
Wichterle fue rehabilitado plenamente tras la Revolución de Terciopelo y entre los años 1990 y 1993 fue elegido presidente de la Academia de Ciencias Checoslovaca. El químico falleció en 1998 a los 84 años de edad.
La exposición, instalada en la sede de la Academia de Ciencias, que conmemora al gran científico checo, permanecerá abierta hasta el 31 de octubre. La entrada es gratis.