Políticos checos celebran la victoria del “niño prodigio” en Austria

Sebastián Kurz, foto: ČTK

Políticos checos saludan el triunfo de Sebastián Kurz en Austria, porque ayudará a fortalecer las relaciones mutuas.

Sebastián Kurz,  foto: ČTK
Conocido como el “niño prodigio”, Sebastián Kurz, no defraudó a sus seguidores convencidos de que el carismático político de 31 años tomaría las riendas del país.

Con un estilo similar al de Emmanuel Macron en Francia, Kurz ofreció al electorado algo diferente, con aires de novedad y, tal vez lo más importante, un rostro joven.

Los políticos checos han saludado el triunfo del Sebastián Kurz, porque representa un proyecto de buena vecindad, según explicó el ministro de RR.EE. checo, Lubomír Zaorálek.

“En este momento debo recordar que juntos impulsamos el renacimiento de las relaciones checo-austríacas. Me hace ilusión el hecho de que Sebastián Kurz, que tendrá un papel determinante en la política de Austria, representa una buena oportunidad para mantener el curso de las actuales buenas relaciones entre Chequia y Austria”.

Kurz y su Partido Popular Austríaco (ÖVP), con una imagen completamente nueva, lograron una significativa victoria sobre los socialdemócratas (SPÖ) hasta hace poco aliados de gobierno y el derechista Partido de la Libertad de Austria (FPÖ).

Para el vice primer ministro checo, Pavel Bělobrádek, se trata de un triunfo positivo para la región y para Europa.

“Los populares ganaron en Alemania y ahora en Austria, eso me alegra, porque el concepto de la economía social de mercado y reducción de los extremos son importantes para Centroeuropa y para la Unión Europea”.

Pavel Bělobrádek,  foto: ČTK
Las prensa austriaca se ha referido a la victoria de Kurz como a un “triunfo histórico”, porque se presentó a las urnas con un estilo que rompió con lo aplicado hasta el momento por los partidos austríacos.

Kurz, transformó su partido en una suerte de grupo de apoyo a la lista personal con la que se presentó a los comicios y que se conoció como la “Lista Kurz-el Nuevo ÖVP”.

Durante la campaña electoral, Sebastián Kurz aseguró que los electores tenían en sus manos la oportunidad de lograr un verdadero cambio, y prometió luchar por un nuevo estilo en la política austríaca.

Las próximas semanas pondrán a prueba la capacidad de negociación del “niño prodigio”, que a pesar del triunfo alcanzado no dispone de mayoría absoluta y difícilmente volverá a formar coalición con la socialdemocracia de la que se divorció para forzar estos comicios.