El dudoso pasado de Pernes no le impide seguir en el Instituto para el Estudio de los Regímenes Totalitarios

Jiří Pernes

El Consejo del Instituto para el Estudio de los Regímenes Totalitarios ha confirmado al historiador Jiří Pernes como director de la institución, a pesar de la información hecha pública la semana pasada, que atestigua cierto grado de compromiso con el régimen comunista.

Jiří Pernes
El pasado no perdona. Los medios checos pusieron en la palestra la vida de Jiří Pernes, llegando a cuestionar su reciente nombramiento como director del Instituto para el Estudio de los Regímenes Totalitarios. El historiador había asistido a la Universidad Nocturna de Marxismo-Leninismo, dedicada a la formación ideológica, y en los archivos de la Policía Secreta figuraba como candidato a colaborador.

La polémica sobre la idoneidad de Pernes para el puesto estuvo, además, salpicada de intereses políticos. Mientras que el nuevo director se encuentra más cercano a los socialdemócratas, su antecesor y rival a la hora de competir por el puesto, Pavel Žáček, es más próximo a la derecha.

De hecho, el vicepresidente del Partido Socialdemócrata, Lubomír Zaorálek, salió a la defensa de Pernes y aseguró que se trataba de una campaña de descrédito promovida por Žáček. Este, sin embargo, se defendió alegando que es normal que los medios indaguen en el pasado cuando se trata de cargos de responsabilidad.

“El protocolo de registros se encuentra en Internet ya un año y medio, en el archivo de los documentos de seguridad. Ni siquiera en los archivos de nuestro Instituto. Si uno escribe Jiří Pernes le sale toda la información. Creo que en interés del señor Pernes, lo mejor sería que se encontraran todos los materiales y fueran hechos públicos. La posición de director del Instituto no puede ponerse en duda”, afirmó.

Pernes todo el tiempo mantuvo que no había presentado estos datos en su currículum porque se trataba de formación ideológica y no académica, y que había aceptado ir a la Universidad de Marxismo-Leninismo para conservar su puesto como director del museo de Slavkov. En su opinión, no hay nada de qué acusarle.

“Tengo la conciencia tranquila. La Policía Secreta me ofreció que colaborara con ellos y yo lo rechacé tajantemente. Luego, en el año 90, cuando solicité mi “lustración” política me dijeron que estaba clasificado como candidato a colaborador secreto de la Policía. En la misma categoría estaba por ejemplo el ex presidente Václav Havel, así que más tarde el Tribunal Constitucional canceló esta categoría como motivo para no tener un pasado político limpio”, insistió Pernes.

El Consejo del Instituto para el Estudio de los Regímenes Totalitarios apoyó la investidura de Jiří Pernes por cuatro votos contra tres. El cargo se hará efectivo el 1 de abril.

Autor: Carlos Ferrer
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