Jueces y políticos cobrarán menos por la política de recortes

Jueces y representantes públicos cobrarán menos en la República Checa según la nueva propuesta de ley del Gobierno, medida que ha desatado la controversia en los órganos judiciales. El recorte produciría un ahorro de 40 millones de euros.

La política de recortes del Gobierno derechista de Petr Nečas parece que no solo arremeterá contra los funcionarios de a pie, sino que se prepara para bajar los sueldos también a los representantes institucionales.

Según la propuesta de ley presentada este miércoles, diputados y senadores verían reducidos sus salarios en un cinco por ciento toda la legislatura, hasta 2014, con lo que su paga básica se quedaría en 2.240 euros mensuales. El ajuste es otra vuelca de tuerca porque este año los políticos ya habían sufrido un descenso de sueldo del cuatro por ciento respecto a 2009.

Algo parecido sucederá con los ministros, que de sus actuales 4.500 euros al mes pasarán a cobrar 4.270. En el caso de los jueces, la bajada será efectiva solo para 2011, año en el que cobrarán 2.160 euros de media, para después volver a las remuneraciones de 2009.

Aunque parece que ningún diputado protestará contra la medida en esta época de austeridad, jueces y fiscales ya han levantado la voz. En opinión de la Unión de Jueces, sus salarios no crecen desde hace años, con lo que reducirlos ahora es injusto, tal como ha declarado su presidente, Tomáš Lichovník.

Tomáš Lichovník, foto: www.ct24.cz

“Solo como ilustración: desde el año 2002 el sueldo promedio en la esfera pública ha crecido en un 52 por ciento. Mientras que el salario base con el que se calculan nuestras remuneraciones se ha incrementado en solo un 22 por ciento, y eso debido a que desde esa fecha nuestros sueldos han estado congelados”, afirmó.

Como solución alternativa, la Unión de Jueces sugiere congelar los sueldos hasta que se equiparen con los del resto de funcionarios, y en ese momento proceder a una reducción, si es necesario.

El argumento de los jueces es considerado sin embargo absurdo por el ministro de Justicia, Jiří Pospíšil, ya que, en sus palabras, el estado no tiene recursos y debe ahorrar en todos los capítulos. Además, los recortes los padecen todos los trabajadores públicos, por lo que no ve el motivo por el que los jueces tuvieran que ser una excepción.

Aún así los jueces no descartan llevar el caso ante el Tribunal Constitucional, cuando la ley sea aprobada en el Parlamento. Una maniobra que les llevaría a jugar en casa, en su propio terreno.

En el caso de los fiscales, que también cobrarán un cinco por ciento menos en los próximos cuatro años, el paso ha sido visto como una degradación de la profesión, que cada vez sale peor parada en su comparación con la de juez. Según la Unión de Fiscales, el resultado será que los jóvenes y prometedores profesionales preferirán irse al sector privado y trabajar en la abogacía, con el consiguiente detrimento en la lucha contra la corrupción.