Nueva ley brindará mayor protección a trabajadores extranjeros
El reciente ataque terrorista en Noruega; aumenta el fraude a las aseguradoras; nueva ley protegerá a los trabajadores extranjeros. Estos son algunos de los temas a los que dedica atención la prensa checa de este lunes.
Lidové Noviny escribe que durante el fin de semana, decenas de checos colocaron flores y velas encendidas junto a la Embajada de Noruega en Praga para rendir homenaje a las víctimas del ataque terrorista contra personas inocentes e indefensas.
No obstante, en comparación con los daños causados por las riadas el año pasado, las pérdidas materiales son mucho más reducidas. Lo más importante, según el periódico, es que este año las inundaciones no se cobraron ninguna vida humana.
Las compañías aseguradoras consideran que el número de personas que tratan de engañar por medio del seguro de viajes se incrementó a raíz de la crisis económica.
Durante los primeros seis meses del presente año los agentes de las aseguradoras descubrieron 370 intentos de fraude contra sus compañías. El número de estafas a las aseguradoras se duplicó en comparación con el mismo período del año pasado, indica Právo.
En el país existen muchas empresas que emplean a extranjeros sin permiso oficial y luego no les pagan el sueldo acordado. Los trabajadores ilegales no pueden presentar una denuncia y se quedan sin recursos.
El Gobierno checo prepara una enmienda a la Ley de Extranjería que dificultará semejantes prácticas. Los extranjeros tendrán derecho a exigir el salario, aunque hayan trabajado ilegalmente. Y a las empresas que se nieguen a pagar a sus empleados, las autoridades checas les aplicarán altas multas, afirma Lidové Noviny.
El presidente del Consejo Ecuménico, Joel Ruml, sostuvo que las Iglesias necesitan un período de transición para adaptarse a las nuevas condiciones y prepararse a la autofinanciación. No obstante, la separación del Estado es un hecho acordado.
Durante el período de transición el Estado seguirá financiando a las Iglesias y compañías religiosas del país. Además, el Estado Checo dispondrá de tiempo suficiente para que pueda devolver a las Iglesias las propiedades que le fueron confiscadas por el régimen comunista, indica Právo.
