Políticos mentirosos, corrupción, Bielorrusia y Siria
De la semana noticiosa destaca el nacimiento del proyecto 'Demagogo', para denunciar a los políticos mentirosos; el comienzo del juicio sobre corrupción más grande en la historia del país; las críticas a Bielorrusia en una reunión de alto nivel en Praga; y el festival internacional de cine documental Un Mundo, que se celebra en la capital checa hasta el 15 de marzo.
Un grupo de estudiantes de ciencias sociales de la Universidad Masaryk de Brno presentó este miércoles un proyecto titulado ‘Demagogo’, cuyo objetivo es someter los debates televisivos a un control constante y descubrir discrepancias en las declaraciones de los políticos.
Tereza Skládanková, coordinadora del proyecto, explica cómo se lleva a cabo el control de los políticos que mienten.
Cada lunes un grupo de jóvenes analistas, que por el momento cuenta con 11 voluntarios, verifica lo dicho por los políticos en los debates televisivos que se transmitieron el fin de semana anterior.
El martes publican los resultados en una página Internet, accesible al público en general.
Tereza Křepelková, analista del ‘Demagogo’, señala, que el proyecto puede mejorar la cultura política en el país.
“Esperamos que bajo control, los políticos eviten decir mentiras. Les importa mucho cómo los describen los medios y lo que la gente piensa de ellos y no van a querer tener fama de mentirosos. También creemos que nuestro proyecto puede aportar más objetividad a los debates televisivos”.
La idea de controlar a los políticos viene de Eslovaquia donde un proyecto estudiantil del mismo nombre funciona desde hace dos años.
David Ondráčka, representante de Transparencia Internacional opina que el juicio sacará a la luz algunas de las prácticas y el funcionamiento interno del menor partido del oficialismo.
Durante la campaña electoral Bárta se comprometió a luchar contra la corrupción, pero hoy es sospechoso de comportamiento corrupto y en caso de comprobarse las acusaciones, podría ser condenado a seis años de prisión.
Todo empezó cuando Jaroslav Škárka, acusó a Vít Bárta de comportamiento corrupto. Škárka denunció que Bárta le había entregado un sobre con unos 7.000 euros para comprar su lealtad. Bárta no niega que le entregó el dinero, pero asegura que se trató de un préstamo.
Bielorrusia rechazó la invitación para participar en la cumbre del Grupo de Visegrado, integrado por la República Checa, Eslovaquia, Hungría y Polonia, con los países bálticos y la Asociación Oriental, que busca estrechar relaciones entre los Veintisiete y los países ex soviéticos.
El jefe de Estado bielorruso reaccionó expulsando del país al embajador de la UE y de Polonia y suspendió el diálogo con los Veintisiete, según señaló el ministro de RR.EE. checo, Karel Schwarzenberg.
“Me da pena que no haya venido nadie de Bielorrusia. Por otro lado, la expulsión de los embajadores europeos fue un paso desafortunado. La parte bielorrusa se siente ofendida, mientras que nosotros no podemos aceptar su actuación por solidaridad con los embajadores expulsados”, dijo.
La ex primera ministra ucraniana fue condenada a siete años de prisión por haber firmado un contrato de gas con Rusia supuestamente desventajoso para Ucrania.
La Primavera Árabe, especialmente la revolución siria, el movimiento de los indignados españoles, también conocido como movimiento 15-M, y la crisis griega.
Todos son hechos muy actuales y que de una u otra forma tendrán cabida en esta edición del festival, aunque sin olvidar la problemática latinoamericana, africana y asiática.
“Podremos ver una película de una directora franco-siria, que se titula ‘Siria en Medio de la Revolución’, que cuenta la historia de la revolución contra Bashar Al-Assad durante 14 días. Es un documental notable porque en Siria es muy difícil rodar o dar cualquier información sobre lo que allí está pasando”, comenta.
El festival internacional de cine documental por los derechos humanos Un Mundo, que se extiende hasta el 15 de marzo, se celebra en diversas salas capitalinas, como Atlas, Evald, Lucerna, Ponrepo y Světozor.
