La pesada carga de llevar la paz a Guatemala
El festival de cine dedicado a los Derechos Humanos 'Un Mundo 2015' acogerá este jueves el preestreno mundial del documental 'Carga de Paz' (Burden of Peace), que retrata la ardua misión de Claudia Paz y Paz, la primera mujer en el cargo de Fiscal General de Guatemala. Radio Praga habló sobre el rodaje y la situación de uno de los países con más homicidios del mundo con uno de los creadores del documental, el holandés Joey Boink.
Durante su mandato, Claudia Paz y Paz tuvo que enfrentarse a ataques, demandas judiciales y campañas llevadas en su contra, realizadas por partidarios de los antiguos militares guatemaltecos.
Claudia Paz y Paz fue incluida en 2012 por la revista estadounidense Forbes entre las cinco mujeres 'más poderosas que cambian el mundo con la política' y el año siguiente fue nominada al Nobel de Paz. En 2014 recibió el Premio de Derechos Humanos, otorgado por La Oficina de Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA).
Demostrar la transparencia de la Fiscalía General
El documental 'Carga de Paz' (Burden of Peace), realizado por dos directores holandeses, Joey Boink y Sander Wirken, ofrece un testimonio sobre la lucha de Claudia Paz y Paz por mejorar la situación de su país, azotado por la violencia.
“Todo empezó en 2007 cuando por primera vez visité Guatemala junto con mi compañero Sander Wirken. Él se dedicaba a construir una escuela y fundó una organización que se llama 'Niños de Guatemala'. Yo hice un documental sobre este proyecto. Después realicé en Guatemala una investigación para mi maestría en Ciencias Políticas. Entonces ya teníamos una historia en el país y en 2010 o 2011 pensamos que tendríamos que regresar y hacer un documental sobre la violencia en Guatemala, que es el tema más peligroso, y tiene su carga en la comunidad guatemalteca. Entonces quisimos hacer un documental sobre la raíz de la violencia”.
“La guerra terminó, la violencia no”
“Guatemala tiene una historia muy fuerte. Hubo una guerra que duró más de 35 años. Terminó en 1996, pero la violencia nunca terminó. Ahora hay muchos problemas con el tráfico de drogas, con las maras, que tienen cada vez más poder, con los carteles de México que están llegando a Guatemala,... Entonces hay una crisis de seguridad en el país. Y en medio de esta crisis Claudia Paz y Paz quiso cambiar la cultura de la violencia”.
Cambiar el sistema fiscal
Según afirma Joey Boink, tras convertirse en la titular del Ministerio Público Guatemala, Claudia Paz y Paz tuvo que poner sobre sus hombros una gran carga.
Claudia Paz y Paz puso en marcha una exitosa labor, que llevó ante la justicia a numerosos asesinos y narcotraficantes. Incluso por primera vez en la historia de Guatemala llevó al tribunal a un exjefe de Estado, Efraín Ríos Montt, que encabezaba la dictadura en el país en los años ochenta, fue acusado de la muerte de 1.771 indígenas de la etnia ixil.
Para seguir el trabajo de Claudia Paz y Paz, Joey Boink y Sander Wirken realizaron seis viajes a Guatemala, y en conjunto la siguieron con la cámara durante un año.
“Ella dijo muy claro que el sistema necesitaba cambiar y que si los fiscales no investigaban, que sentirían las consecuencias. Ella tenía muy buena relación con otros organismos, como la Policía Nacional y la Organización de los Derechos Humanos. También contaba con apoyo de otros países, que confiaban en que bajo su liderazgo el dinero del Ministerio Público no iría a los corruptos, sino sí a la investigación contra ellos”.
Querer mejorar el país - sacrificar la vida personal
“Ella trabajaba bajo mucho estrés y bajo muchos ataques de los medios. Hubo una campaña negra contra ella por el trabajo que hizo. Estuvimos con ella cuando estos mensajes pasaron por las revistas y por la radio y pudimos ver cómo ella reaccionaba a todo esto. Ella es una persona que tiene sus principios muy altos y creo que van más arriba de lo que es mejor para ella misma. Esto es un conflicto que puede tener un efecto muy grave personalmente. Quieres mejorar tu país y sacrificas tu vida personal”.
“Tal vez solo unos momentos cuando fuimos a operaciones de torturas. Siempre puede pasar algo, que los maras puedan usar sus armas. Yo me quedaba cerca del carro o buscaba un lugar para no estar en medio del combate. Gracias a Dios no pasó nada”.
La gente por primera vez pudo hablar
“Muy especial fue estar allí cuando capturaron a Óscar Mejía Victores, esa fue la primera captura de un país contra su propio ex jefe del Estado por genocidio. La primera vez en el mundo que pasó algo así. Entonces eso fue muy especial, haber sido testigo de esta escena con la cámara. Después pasaron varios momentos así como un juicio contra un genocidio. Fue espectacular estar allá, porque por primera vez en la historia la gente ixil pudo hablar en frente de un juez sobre lo que pasó con sus familias en los años ochenta. Esto fue un cambio muy fuerte en el país, pues nunca habían podido hablar sobre lo que pasó”.
“Aunque cuesta, el cambio es posible”
„Pienso que, aunque es fuerte, el documental puede demostrar que sí se puede cambiar algo. Claudia ha mostrado que un sistema tan desesperado se puede cambiar por algo mejor. El cambio es posible, aunque cueste, y cada paso es tremendamente importante. Espero que la película pueda ser un mensaje para la gente de diferentes partes mundo que vive en culturas en desigualdad, corrupción, violencia y que todo puede mejorar “.
Según afirmó el joven director holandés, en sus futuros proyectos seguirá contando las historias que movilicen a la gente y su próxima película documental retratará una historia del continente europeo.
