Zaorálek: ”Recomendamos a nuestros ciudadanos que no viajen a Estambul y Ankara”

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El Ministerio de RR.EE. checo recomienda a los ciudadanos que eviten viajar a Estambul, Ankara y al sureste de Turquía. La situación de la seguridad en el país tras el fallido golpe de Estado del viernes sigue siendo de difícil lectura. El ministro de dicha cartera, Lubomír Zaorálek, espera que el Gobierno turco mantenga sus compromisos con la Unión Europea.

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País miembro de la OTAN, y con el segundo mayor Ejército de la Alianza después de EE.UU., Turquía representa una ficha clave para el mundo occidental.

Gracias a su situación geográfica Turquía es importante en el Medio Oriente y un puente entre Asia y Europa, y es precisamente por todo eso que un fuerte brote de inestabilidad en el país puede repercutir en la región y en el mundo entero.

Tranquilidad en los centros turísticos

Los políticos europeos han expresado su preocupación por los sucesos de Turquía y anunciaron que tomarán medidas al respecto. Han expresado temor por la seguridad de sus turistas, como indicó a la Televisión Checa, el ministro de RR.EE., Lubomír Zaorálek.

Lubomír Zaorálek,  foto: Filip Jandourek,  ČRo
“En Turquía tenemos alrededor de 7.000 ciudadanos checos. En este momento nada indica que alguna persona haya resultado herida o que se encuentre desaparecida. Tenemos informaciones de que en los centros vacacionales todo transcurre de la manera habitual, por lo que en este momento nuestros turistas no corren peligro“.

El ministro agregó que en caso de urgencia el Gobierno está en condiciones de enviar un avión especial para evacuar de Turquía a los turistas checos. Desde el punto de vista político, Zaorálek y otros representantes de los países miembros de la Unión Europea esperan que Turquía mantenga los compromisos adquiridos con Bruselas.

“Existe un fuerte argumento, y es que el Gobierno que adquirió los compromisos con la Unión Europea sigue siendo el mismo. Por supuesto las Fuerzas Armadas turcas se encuentran debilitadas y desconocemos en qué medida están en condiciones de resguardar las fronteras entre Turquía y Grecia”.

Turquía una pieza fundamental

Estambul,  foto: ČTK
La Unión Europea considera a Turquía como una pieza fundamental para controlar la ola migratoria que se levanta desde Oriente Medio. La tensión existente y las evidentes luchas intestinas entre las corrientes políticas turcas pueden perjudicar el cumplimiento de requisitos para un mayor acercamiento con Bruselas, insinuó Zaorálek.

“Un problema puede surgir en lo relacionado con la eliminación de visados para los turcos que viajen a la Unión Europea. Una de nuestras condiciones es que Turquía debe cambiar su política de lucha contra el terrorismo, de tal manera que se respeten principios como la libertad de expresión y las libertades fundamentales. Partiendo de los últimos acontecimientos no sabemos en qué medida podrá Turquía cumplir estos requisitos”.

El presidente de la República, Miloš Zeman, expresó que resulta indispensable evitar más derramamiento de sangre, y que hay que mantener el orden democrático en Turquía, país miembro de la OTAN y ficha clave en la región.

Por su parte, el primer ministro, Bohuslav Sobotka, fue contundente en sus declaraciones y aseguró que el Estado checo velará por la seguridad de sus ciudadanos.

Desde hace varios años Turquía se ha convertido en uno de los destinos turísticos preferidos de los viajeros checos. En estos momentos se encuentran en el lugar unas 7.000 personas.

Debido al aumento del peligro muchos turistas han optado este año por otros destinos, y los acontecimientos de los últimos días en Turquía provocan la cancelación de paquetes de verano.

Las agencias de viaje no ayudan

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Algunas agencias de viajes han salido en ayuda de los clientes y les han aceptado cambios en el destino final, mientras que otras se han negado, según indicó a la Televisión Checa, un viajero identificado como Tauber.

“No están dispuestos a brindar una solución aceptable para los viajeros. Se respaldan en que el Ministerio de RR.EE. aprobó una declaración en la que recomienda, pero no prohíbe viajar a Turquía”.

Muchos checos permanecen en Turquía y aseguran que en los centros vacacionales no han sentido tensión alguna raíz de la intentona golpista y aseguran que continuarán su programa como estaba establecido al salir de Praga.

A pesar de la reapertura de los grandes aeropuertos turcos, muchas líneas aéreas han cancelado sus vuelos y la normalidad del transporte aéreo no termina de llegar para muchos viajeros varados en las terminales.