Ministra de Salud no dio la talla
El primer ministro checo, Jiri Paroubek, destituyó este miércoles a la ministra de Salud, Milada Emmerová. Su destino pendía de un pelo desde hace meses. Contra la Cartera de Salud llovieron constantemente críticas y la situación se volvió insostenible.
Los médicos generales privados protagonizaron recientemente una huelga para protestar por el mal funcionamiento de las cajas de seguro que pagan con muchos meses de retraso.
La gota que colmó el vaso fue el anuncio de una renuncia colectiva de los vice ministros de Salud que argumentaron que la crisis en el Ministerio empezaba a volverse insuperable.
Durante un tiempo el primer ministro Paroubek mantuvo su mano protectora sobre la ministra de Salud; pero todo tiene un límite.
"Considero que ese Ministerio necesita tranquilizarse, por eso me decidí de esa manera. Informé al respecto al presidente de la República y me tomé una semana para decidir quién será el nuevo ministro", subrayó el primer ministro.
El diario Mladá Fronta Dnes advierte que las elecciones generales tendrán lugar dentro de ocho meses, por lo que el nuevo ministro de Salud logrará cuando mucho tranquilizar la situación en el Ministerio, pero no resolverá la crisis en el sector de la salud.
El primer ministro baraja varios nombres para el eventual nuevo ministro de Salud. Entre los más nombrados destaca el presidente del Colegio de Médicos, David Rath, quien dijo que estaría dispuesto a encabezar el Ministerio de Salud.
El primer ministro Paroubek pidió al ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Zdenek Skromach, que lleve las riendas del Ministerio de Salud hasta el nombramiento del nuevo ministro.