Los Ferrocarriles Checos se preparan para los nuevos tiempos

Foto ilustrativa: Filip Jandourek

La liberalización de los ferrocarriles y la elevada deuda serán los problemas a los que tendrá que enfrentarse la compañía estatal de ferrocarriles. El Gobierno ya está buscando soluciones y ha asegurado su continuidad.

Foto ilustrativa: Filip Jandourek
El primer ministro Bohuslav Sobotka se ha reunido recientemente con los sindicatos ferroviarios para hacer un llamamiento a la calma y asegurarles la continuidad estatal de la compañía Ferrocarriles Checos, pese a las medidas que habrá de afrontar para reducir su excesiva deuda y para amoldarse al modelo comunitario de liberalización de los servicios. Según Sobotka, el Gobierno quiere asegurarse de que siguen desempeñando un papel central en el sector ferroviario.

De momento, el Ejecutivo mantiene conversaciones con los gobiernos regionales de Baviera y Sajonia para crear nuevos enlaces ferroviarios, así como entre las ciudades de Praga, Brno y Ostrava.

En los últimos años, la compañía estatal ha renovado sus trenes y mejorado los servicios, algo que ha supuesto inversiones que tendrá que pagar en un futuro. Una situación que puede verse agravada por la entrada al sector de nuevos actores, fruto de la política de mayor competencia que exige Bruselas y que sobre todo afectaría a la empresa nacional de transporte de carga, ČD Cargo.

Y es que el transporte por carretera le ha ganado últimamente la partida a ČD Cargo. El volumen de su negocio global se ha mantenido en los últimos años en torno a los 545 millones de euros, frente a casi 653 de 2008. Una bajada de los ingresos que se agudiza por la necesidad de renovar sus convoyes, muy anticuados y que ya no responden a las necesidades de sus clientes.

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