Las antiguas zonas industriales se van despoblando
El Ministerio para el Desarrollo Local quiere frenar el paulatino desalojamiento de las antiguas zonas industriales y de extracción de carbón en Chequia. Para lograr ese objetivo prevé utilizar las subvenciones de la Unión Europea.
Varias regiones de la República Checa han pasado por un gran cambio de sus programas económicos durante los últimos años. Esto se debió al cierre de algunas empresas, así como de minas de carbón. A raíz de estos cambios algunos distritos y regiones enteras se fueron despoblando.
En Ostrava, una ciudad tradicionalmente minera situada en el noreste del país, fue donde se registró la mayor reducción del número de habitantes durante el último decenio. Entre 2011 y 2018 este ha bajado de más de 300 000 personas a unas 290 000. La despoblación se fue registrando en toda la región de Moravia-Silesia, así como en las de Ústí y Karlovy Vary.
El Gobierno considera alarmante este fenómeno por lo que adopta medidas para frenarlo. Además de brindar apoyo financiero a la administración pública de esas regiones en programas de recualificación o de ayuda en la búsqueda de nuevos puestos de trabajo, así como en la construcción de nuevas viviendas.
El Ministerio para el Desarrollo Local promueve programas de apoyo a los autónomos y la mediana empresa en las regiones afectadas para impulsar el interés de los ciudadanos por quedarse allí. Ofrece también préstamos ventajosos a jóvenes familias que decidan quedarse a vivir en esos lugares.
De acuerdo con la ministra de la cartera, Klára Dostálová, en ayuda a esas zonas van destinados anualmente más de 58 millones de euros en subvenciones del presupuesto nacional y alrededor de 621 millones de euros de los fondos europeos.
El Ministerio tiene preparados proyectos de desarrollo regional también para el periodo de 2021 a 2027. El dinero a ser utilizado para su realización y que provendrá tanto de fondos nacionales como europeos, será aprovechado en especial para el desarrollo del turismo y de la empresa.