La fiscal general del estado se enfrenta a una multa de 200.000 euros

La fiscal general de la República Checa, Lenka Bradáčová, se enfrenta a una multa de 200.000 euros promovida por la Oficina de Protección de Datos Personales. Según se denuncia, Bradáčová publicó a principios de mes los sueldos de sus subordinados, lo que supone una violación de su derecho a la privacidad. La fiscal hizo pública esta información en reacción a una petición ciudadana que así lo pedía y que se basaba en el derecho a la información. La petición contaba con el respaldo de una sentencia del Tribunal Supremo. Según la Oficina de Protección de Datos Personales, Bradáčová no debería haber publicado los nombres de los empleados junto con los sueldos.

Autor: Carlos Ferrer