La conservación de los límites de extracción de carbón levanta ampollas
El futuro Gobierno tripartito ha anunciado que se seguirán respetando los límites establecidos de extracción de lignito. Los sindicatos amenazan con huelgas por los puestos de empleo que podrían perderse. Mientras, los habitantes de la localidad de Horní Jiřetín respiran aliviados.
En el pueblo de Horní Jiřetín, de unos dos mil habitantes, situado en la región de Ustí nad Labem, tienen motivos para alegrarse. De no respetarse los límites establecidos, la cercana cantera ČSA podría seguir expandiéndose, rodeando la localidad. El Ayuntamiento de Horní Jiřetín lo celebra como una importante victoria, según han expresado, justo al contrario que los sindicatos.
“Yo le pediría a todos estos expertos en medio ambiente y en energía que de paso nos digan qué vamos a hacer con todos los trabajadores que tendrán que ir al paro”.
Franta ha anunciado igualmente la preparación de protestas y manifestaciones, y en el momento en el que los límites formen parte del programa de Gobierno, huelgas.
A pesar de que la mayor empresa energética del país, ČEZ, asegura que estos planes no tienen efecto sobre su suministro, Tomáš Drápela, de la Asociación de Centrales Térmicas tiene otra opinión.
Los límites de extracción de carbón en el Norte de Bohemia se adoptaron en el año 1991 y establecen también las zonas donde se puede y donde no se puede establecer una cantera, teniendo en cuenta el impacto ecológico y cómo afecta sobre los municipios cercanos.
A la cuenca ČSA que explota Czech Coal, le quedan 11 años de aprovechamiento con los actuales límites, según la empresa. Sus responsables aseguran que con solo acercarse unos cientos de metros a Horní Jiřetín, la mina podría seguir dando energía por otros 47 años.
