La capa de ozono es más vulnerable de lo pensado, alertan expertos checos

Вацлав Клаус

Un descubrimiento de científicos checos pone en evidencia que la capa de ozono es más vulnerable de lo pensado. El trabajo de los expertos checos, que pone en duda las teorías existentes sobre el desarrollo del agujero de ozono, ha llamado la atención de importantes publicaciones extranjeras.

El ozono atmosférico, que se encuentra entre los 10.000 y los 50.000 metros sobre el nivel del mar, es un filtro transcendental para los rayos ultravioletas procedentes del Sol. Sin él la existencia de la vida en la Tierra sería imposible.

Mediciones científicas han puesto en evidencia que esta capa protectora ha disminuido notablemente en los últimos años. Un nuevo estudio publicado por científicos checos manifiesta que el ozono corre un mayor peligro de lo que se pensaba, según explica Michal Fárník, de la Academia de Ciencias Checa.

“Las nubes estratosféricas polares funcionan como una fábrica química en la que suceden procesos que desembocan en la destrucción del ozono. Estas nubes son formadas por nanocristales de hielo que crecen a medida que van acumulando las moléculas de agua de las nubes atmosféricas. Los experimentos de laboratorio han demostrado que la gravedad de los diminutos cristales de hielo es superior a lo pensado, así que pueden enlazar moléculas en un espacio que supera notablemente su propio volumen, y así crece su capacidad de destruir la capa de ozono”, dijo el experto en la Televisión Checa.

Michal Fárník
Los científicos simularon el paso de los rayos de nanoelementos a través de una cámara llena de gases atmosféricos. Reunieron datos sobre su velocidad que varía en función del enlazamiento de otras moléculas. Al topar con gases peligrosos, como freones, se dispara aún su capacidad de profundizar el agujero de ozono.

El experimento realizado por los checos supone la necesidad de recalcular los pronósticos existentes en cuanto el desarrollo del agujero en la capa de ozono, agregó el científico.

“Los aparatos que pronostican el desarrollo de la capa de ozono tendrán que calcular con otros parámetros, los que hemos medido nosotros. Y es probable que las nuevas mediciones difieran bastante de las teorías existentes”, matizó.

El trabajo publicado recientemente por los expertos de la Academia de Ciencias se ha convertido en uno de los artículos más leídos de la revista científica internacional The Journal of Chemical Physics.