Hospital no pagará indemnización por esterilización

Helena Ferencikova (Foto: CTK)

El hospital de Vítkovice, en el noreste del país, no pagará indemnización alguna por la esterilización sin previa consulta de una mujer gitana.

Helena Ferencikova  (Foto: CTK)
Hace seis años, Helena Ferencíková, quien entonces tenía 19 años de edad, dio a luz en el hospital de Vítkovice a su segundo hijo. Después del alumbramiento, los médicos del hospital procedieron a la esterilización de Ferencíková, a raíz de supuestas complicaciones en su estado de salud. Aunque el hospital insiste que todo se hizo legalmente y que la paciente firmó estar de acuerdo con la operación, Michaela Tomisová, abogada de Ferencíková, afirma que su cliente no fue informada de las consecuencias de la operación.

"Minutos antes de la operación los médicos le dieron a firmar un papel y, debido a que antes del parto suelen firmarse varios documentos, ella pensó que se trataba de algo relacionado con el nacimiento del niño, por lo que no vaciló en firmarlo sin haberlo leído previamente".

El Tribunal Supremo reconoció la justificación de la demanda, pero rechazó la exigencia de Ferencíková que pedía una indemnización de parte del hospital de Vítkovice por un millón de coronas, unos 36 mil euros, decidiendo que el hospital sólo debe disculparse. El portavoz del Tribunal Supremo de Olomouc, Petr Angyalossy, explicó este veredicto.

Helena Ferencikova  (Foto: CTK)
"El Tribunal no pudo actuar de otra manera, ya que la demandante presentó la acusación seis meses después de vencer el período de tres años estipulado por la Ley para exponer la demanda".

Helena Ferencíková afirma que está contenta porque el Tribunal reconoció la justificación de su demanda, pero simultáneamente añade con tristeza que ningún veredicto puede cambiar su estado de salud.

"Soy joven y, de no haber sido esterilizada, podría haber tenido otros hijos. Pero ya nunca podré tenerlos".

La joven de 25 años de edad insiste que a causa de la esterilización sufre un complejo de inferioridad y además padece diversos problemas de salud. Organizaciones No Gubernamentales checas recalcan que el caso de Ferencíková no es único y que habrá otras demandas de mujeres gitanas por esterilización sin previa consulta.