En los adornos navideños, el consumidor checo opta por la tradición

Adorno navideño de cristal de la cooperativa Irisa

En la producción de adornos de cristal para árboles navideños, la República Checa pertenece a las grandes potencias mundiales. Sin embargo, debe luchar ferozmente contra una competencia de productos más baratos provenientes de China, Bulgaria y Rumania.

La aplastante mayoría de los adornos de cristal navideños fabricados por unas treinta empresas checas se exporta. Las razones son varias.

En primer lugar es el conservadurismo del consumidor checo que prefiere la tradición y no le gusta experimentar ni con los colores ni con las formas, señala Jaroslav Trtík, de la cooperativa Irisa, uno de los cuatro productores más grandes de adornos navideños, con sede en la ciudad morava de Vsetín.

"Los consumidores extranjeros suelen cambiar toda la decoración del árbol navideño anualmente dejándose inspirar por las nuevas tendencias de moda en los colores y formas. El consumidor checo más bien compra reemplazos de adornos que se rompieron en Navidades pasadas".

También Boris Kovanda, de la compañía Celebra, con sede en la aldea morava de Jasenná, afirma que el consumidor checo es más reservado ante las novedades.

"Por desgracia, en esto se ve apoyado por la mayoría de los fabricantes checos que ofrecen exclusivamente el surtido que venderán, es decir, las formas y los colores clásicos y tradicionales. Pero debo decir también que la situación va cambiando últimamente. La gente que visita nuestra sala de muestras reacciona cada vez mejor a las decoraciones más atrevidas y modernas".

Celebra registra el mayor interés por los adornos embalados por unidad, tales como muñecos de nieve, villanciqueros, conos, campanillas o cestas con frutas. Según las demandas que su compañía tiene desde el extranjero, Boris Kovanda estima que en esta Navidad estarán de moda los adornos de color burdeos, miel, o de color de oliva en combinación con el color naranja.


Tanto Celebra como Irisa empiezan a producir en menor medida los adornos unicolores sin decoración.

"Este segmento del mercado está dominado por empresas chinas o búlgaras capaces de producir adornos sin decoración y de plástico a costes muy bajos porque disponen de una mano de obra más barata".

...apunta Jaroslav Trtík, de Irisa, y puntualiza que esta es precisamente la segunda razón que obliga a los fabricantes checos a orientarse más a la exportación.

Los fabricantes checos enfrentan la presión de la competencia más barata haciendo hincapié en la alta calidad y en el desarrollo incesante de nuevos modelos y las tecnologías más sofisticadas de producción, explica Boris Kovanda, de Celebra.

"La confección de adornos de cristal para árboles navideños es 98 por ciento trabajo manual y bastante elaborado. Los adornos se soplan de tubos de cristal, luego se platean y se colorean y al final las pintoras aplican un sinnúmero de técnicas diversas para decorarlos. Por ello nuestros adornos son más caros que los de plástico de los vendedores chinos, detrás de los cuales no hay un trabajo artesanal y con tanta maestría".

Celebra e Irisa coinciden en que, por el momento, su apuesta por la calidad, nuevas tendencias y la profesionalidad trae buenos resultados. "En Irisa aumenta la demanda por los adornos ricamente decorados y pintados a mano", matiza Jaroslav Trtík y puntualiza que el testimonio de ello es también el hecho de que sus adornos se vendan en almacenes de lujo de todo el mundo.