El Ministerio de RR.EE. rechaza la crítica de Zeman del trabajo de la embajada en Kiev

El Ministerio de Relaciones Exteriores checo rechazó la reciente crítica expresada por el presidente de la República, Miloš Zeman, respecto al trabajo de la embajada checa en Kiev. El mandatario insinuó que la representación diplomática mantiene contactos mínimos con los descendientes de checos de la región ucraniana de Volinia y no les brinda ayuda en su eventual repatriación a la República Checa.

Miloš Zeman, foto: ČTK

La Diplomacia checa respalda las labores de su embajada en Kiev. El Ministerio de Relaciones Exteriores de Praga insistió en que la crítica del presidente, Miloš Zeman, en el sentido de que los diplomáticos checos se interesan poco por los descendientes de checos de Volinia, es totalmente infundada. Según recalcó la portavoz del ministerio, Johana Grohová, no existe indicio alguno, ni tampoco nadie se ha quejado hasta el presente del trabajo de la embajada.

”El Ministerio del Exterior no dispone de información fidedigna alguna que pusiera en duda la labor de la representación diplomática checa en Kiev”.

Representantes del Ministerio de RR.EE. sostuvieron que la situación en Ucrania es monitoreada detalladamente y, en caso de que existieran indicios sobre eventuales errores cometidos por los diplomáticos checos en ese país, se adoptarían las medidas necesarias. Hace poco visitó Ucrania el ministro de Exteriores, Lubomír Zaorálek, quien mantuvo también un encuentro con los checos de Volinia para conocer su situación.

Lubomír Zaorálek en Volinia, foto: MZV ČR

El embajador en Kiev, Ivan Počuch, no quiso comentar las palabras del presidente Zeman e indicó que él personalmente se enteró por los medios de información de que algunas familias de Volinia quieren ser repatriadas a Chequia.

El pasado mes el mandatario checo, Miloš Zeman, respaldó la solicitud de repatriación, presentada por 40 familias de checos de Volinia en marzo pasado. Actualmente se sumaron a la solicitud supuestamente más de 70 familias de descendientes de checos de Volinia y de Crimea, así como los checos del este de Ucrania, donde tienen lugar duros enfrentamientos entre los separatistas prorusos y las tropas leales a Kiev.

La repatriación de los checos de Volinia no es actualmente un tema prioritario del Gobierno de Praga. No obstante, el ministro del Interior, Milan Chovanec, dijo que cualquier solicitud de esa índole es detalladamente estudiada y en caso de haber serios motivos para ese paso, Chequia trataría de ayudar.

Milan Chovanec, photo: Filip Jandourek, ČRo

”Primero debemos disponer de alguna lista con nombres y datos concretos de los eventuales solicitantes de repatriación. En colaboración con la embajada checa en Kiev y el Ministerio de Relaciones Exteriores de Praga podemos entrar luego en contacto con esas personas para saber si realmente quieren ser repatriadas y si existen motivos verdaderamente serios para ello”.

El tema de la repatriación es delicado y podría complicar las relaciones entre Chequia y Ucrania. Según acotó el ministro Chovanec, Praga accedería a la solicitud de repatriación en caso de que estén en peligro las propias vidas de los descendientes de los checos de Volinia.

Volinia es una región de Ucrania que en el pasado perteneció tanto a Polonia como al imperio ruso. Desde la segunda mitad del siglo XIX comenzaron a asentarse allí también muchos checos. Un grupo regresó a su patria después de la Segunda Guerra Mundial, otro después de los cambios democráticos de 1989, y algunos descendientes de checos se quedaron a vivir en Ucrania.