El Gobierno suaviza restricciones, pero quiere prolongar el estado de emergencia
El Gobierno checo anunció la reapertura de papelerías, tiendas de ropa para niños y lencería a partir de este martes, al tiempo que pedirá la prolongación del estado de emergencia a la Cámara de Diputados.
El primer ministro Andrej Babiš anunció una relajación de las restricciones que buscan frenar la expansión de la pandemia de COVID-19, en momentos en que crece el descontento en la sociedad por los problemas en torno a la vacunación masiva.
Babiš informó a la nación que a partir de este martes pueden reabrir las papelerías, tiendas con ropa y calzado para niños, así como las de lencería.
“Será posible comprar en las tiendas pequeñas y en los centros comerciales. Pero en este momento no puedo imaginarme que se suavicen más las restricciones cuando tenemos una gran cantidad de personas hospitalizadas“.
En estos días de confinamiento y restricciones toda reapertura es bien recibida, pero la población y los políticos de la oposición siguen sin comprender el principio aplicado por el Gobierno a la hora de suavizar las medidas.
El viceprimer ministro Karel Havlíček, que a la vez dirige la cartera de Industria y Comercio, reveló a los medios de comunicación el origen de una parte de la decisión tomada.
“Recibimos muchas solicitudes de familias jóvenes, necesitan comprar ropa y zapatos para sus hijos pequeños. Es cierto que este tipo de mercadería se puede comprar en línea, pero no todas las personas tienen acceso a internet y muchas desean ver y probar el producto escogido“.
El gobierno de Andrej Babiš se había trazado el objetivo de vacunar a finales de enero a unas 178 000 personas, pero todo indica que el sistema de registro no funciona según lo esperado, y las quejas llueven desde todos los sectores de la sociedad mientras las críticas de la oposición van en aumento.
La sesión del Consejo de ministros aprobó el lunes que pedirá a la Cámara de Diputados una nueva prolongación del estado de emergencia hasta el 21 de febrero.
La líder del partido opositor TOP 09, Markéta Pekarová Adamová, adelantó que su agrupación no está del todo a favor de una nueva prolongación del estado de emergencia que vence a finales de esta semana.
“El sistema sanitario está saturado y el estado de emergencia es necesario, pero el problema radica en que el Gobierno no cumple, no ha cumplido ni una sola vez, y nosotros no podemos cargar con parte de sus responsabilidades“.
Desde el interior del país, las críticas contra el gobierno también van en aumento, sobre todo en lo que respecta al mal funcionamiento del sistema para el registro de vacunación.
Jan Grohlich, gobernador de la región de Moravia del Sur, dijo a la Radio Checa que tienen problemas con la vacunación de personas mayores de 80 años porque no disponen de acceso al sistema central de registro y desconocen la cantidad de vacunas disponibles.
“Es indispensable que alguien a nivel regional tenga acceso al sistema central. Nosotros no podemos planificar actividades, no disponemos de informaciones sobre la capacidad disponible o sobre el número de vacunas en los diferentes hospitales. No podemos llamar constantemente a los directores de los hospitales, así no funciona un sistema unificado“.
De acuerdo con informaciones del portal de noticias iRozhlas existen diferencias enormes entre las cifras planificadas en la estrategia de vacunación y los datos de vacunación disponibles. Además, el Ministerio de Salud se niega a publicar la cantidad y lugares dónde se han enviado dosis de vacunas. La oposición sostiene que el Gobierno no sabe cómo superar el caos provocado, al tiempo que fallan los suministros de vacunas, no hay control público de los pasos del Ejecutivo, y el grupo prioritario, los ancianos de más de 80 años reciben términos de vacunación que en muchos casos son de varios meses.
