El electorado checo no tiene mucho dónde elegir, según el presidente

Václav Klaus, foto: ČTK

Entrevista exclusiva con el presidente Václav Klaus, el inconveniente de recibir un regalo caro y los checos que llevan el apellido de ‘Niño Jesús’ son algunos de los temas que aparecen en la prensa checa de este miércoles.

Václav Klaus,  foto: ČTK
Právo publica una entrevista con el presidente Václav Klaus. El mandatario admite en ella por primera vez que está dispuesto a ratificar la ley sobre el presupuesto estatal para el próximo año, a pesar de serias objeciones.

Además de comentar temas globales, como la recesión económica y la cumbre de Copenhague, Klaus habla sobre la situación en la escena política checa.

Dice que aumenta el número de las personas que se niegan a dar su voto a una de las formaciones más fuertes, es decir, el Partido Cívico Democrático o el Partido Socialdemócrata.

Sin embargo, en su opinión, no tienen otra opción, ya que en Chequia faltan pequeños partidos que ofrezcan programas interesantes. “El electorado checo lo tiene difícil y yo también”, sostiene Klaus en Právo.

“Cuidado con los regalos costosos”, advierte en portada Lidové Noviny. ¿Desean regalar en Navidad un reloj de marca o un collar de brillantes? Entonces, cuenten con que quien lo reciba tendrá la obligación de pagar el impuesto a las donaciones.

Según la normativa checa, sólo los regalos cuyo valor no supere 760 euros están liberados del impuesto. Por supuesto, el tributo no se aplica en casos de parentesco y matrimonio, escribe el periódico.

En Chequia se vende cerveza checa importada de Alemania, indica Mladá Fronta Dnes. El motivo es simple. La cerveza producida en Pilsen, Bohemia Occidental, sale más barata en el país vecino. Además, el precio de botellas retornables también es más bajo allí.

La cervecería Plzeñský Prazdroj argumenta que sólo se importan unas mil botellas al año. No obstante, según datos de la Oficina Estadísticas, su número va en aumento.

Mladá Fronta Dnes también se dio el trabajo de encontrar a todos los checos que llevan el apellido de ‘Niño Jesús’ (en checo, Ježíšek). Todos viven al norte de Moravia, cerca de las fronteras con Polonia, y probablemente se trata de descendientes de una sola persona.

“El apellido se deriva probablemente del nombre de un restaurante o bar, pero también es posible que la gente llamara así a una persona generosa”, opina en el diario Dobrava Moldanová, autora del Diccionario de Apellidos Checos.