El caos se apodera del registro de vehículos

La implantación del nuevo sistema de registro de vehículos ha provocado el colapso de las oficinas durante lo que va de semana. Los fallos del programa son innumerables y el Ministerio de Transportes ya se prepara para volver al sistema antiguo de forma provisional.

Foto: ČTK

Los nervios y el caos acampan a sus anchas esta semana en las oficinas de registro de vehículos de todo el país. Un nuevo sistema debía traer mayor seguridad, transparencia y coordinación con las mismas dependencias del resto de países de la Unión Europea. Sin embargo, el resultado por el momento son solo las crecientes colas y salas de espera abarrotadas de conductores que quizá ahora se arrepienten del momento elegido para comprarse un nuevo auto.

Ladislav Prudil, director del Departamento de Tráfico de Brno, explica alguno de los errores con los que se están encontrando los funcionarios.

“No es posible encontrar los autos en el sistema. Los datos están ahí guardados evidentemente, pero por ejemplo introducimos los datos de nuestros propios vehículos y el sistema nos dice que no existen”.

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En algunas ciudades el registro funciona, pero con extrema lentitud y errores de todo tipo, que obligan por ejemplo a emitir documentos escritos a mano o con máquina de escribir. En Ostrava, una empleada asegura que al día solo consiguen entregar 15 fichas técnicas del vehículo, mientras en circunstancias normales despachan entre 400 y 500. En ciudades como Praga el sistema no funciona en absoluto y se recomienda no acudir a las oficinas en lo que queda de semana.

Desde el Ministerio de Transportes se restó importancia a los problemas en un principio y se defendía el sistema, basándose en las aseveraciones del suministrador responsable del programa y su implantación, ATS-Telcom. Sin embargo ya se ha agotado la paciencia del ministro Pavel Dobeš.

Pavel Dobeš, foto: ČTK

“Los problemas en el nuevo sistema están en muchos lugares distintos. Ahora no somos capaces ni de informar sobre cuándo podrá iniciarse. Por esta razón, como no se solventen todos los problemas este mismo jueves, querremos volver al viejo sistema”.

Aunque el plazo dado por el ministro se agotaba este jueves a las 17:00 horas. Todos los medios informaban desde la mañana de que los funcionarios ya estaban preparando el reinicio del sistema antiguo, que funcionará desde el próximo lunes. Se calcula que los fallos del nuevo sistema podrían tardar meses en ser arreglados.

La República Checa se comprometió a implantar el nuevo sistema en sus más de 200 puntos de registro antes del próximo 1 de enero, y para ello lleva invertidos casi dos millones de euros. Cuando funcione permitirá por ejemplo elegir, previo pago, una combinación personalizada de números y letras en las matrículas, o que un propietario pase una de un vehículo a otro. Además estará conectado con otros registros, como el de la Policía y con el de autos robados a nivel europeo.