Cumbre de la UE en Barcelona con participación de países candidatos

foto: CTK

Barcelona está herméticamente cerrada. Dos aviones F-18, dos C-101, una corbeta, dos patrulleras de la marina y baterías antiaéreas protegen a los presidentes de Gobierno de los Quince y de trece países adeptos que se han dado cita en la Cumbre de la Unión Europea en Barcelona.

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Además del armamento citado, en la operación participan medio millar de soldados del Ejército y ocho mil quinientos efectivos de las Policías. Cabe agregar que es la segunda vez en la historia de las cumbres europeas cuando la OTAN vigilará el espacio aéreo de la ciudad donde tiene lugar el encuentro. Para ello se utilizará un avión con el sistema Awacs.

Si bien muchos analistas se rehusan calificar la reunión de histórica, es la primera vez que todos los países candidatos participan en una cumbre. Así se verá en la práctica qué dificultades traerá una sesión con la participación de veintiocho países, en lugar de quince como ha sido hasta el momento.

El primer ministro checo, Milos Zeman, al igual que sus homólogos de Polonia, Hungría, Eslovaquia y todos los demás, recibieron claras instrucciones de que en Barcelona el tema de la Cumbre no será la ampliación de la Unión Europea.

La liberalización energética, la reforma del mercado laboral y un nuevo impulso al mercado financiero único, eso son los temas centrales de la Cumbre. Si bien es cierto que los Quince están de acuerdo en los objetivos genéricos, surgen dificultades en los ritmos y modo de aplicación.

La República Checa y los demás países aspirantes llegan a la Cumbre de Barcelona convencidos de que la ampliación significará, entre otras cosas, la extensión de la paz y la prosperidad en un continente que avanza hacia la reunificación.

Para el sábado se esperan manifestaciones antiglobalización en Barcelona, por lo que las medidas de seguridad aumentan hora a hora.

Autor: Federico Picado
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