Cartas-bomba contra estafadores
Una persona resultó herida en la capital checa después de abrir una carta-bomba, mientras que la policía logró desactivar entre ayer y hoy otras cinco. Todas estuvieron dirigidas a antiguos miembros de la Junta Directa de la empresa H-System que estafó cientos de millones de coronas a pequeños inversores que pagaron por casas y apartamentos que nunca recibieron.
El herido es el hijo del antiguo director de la empresa H-System, Jaroslav Elias, que sin sospechar de qué se trataba abrió la carta-bomba. De acuerdo con informaciones de la TV NOVA, el artefacto cercenó varios dedos al joven, que actualmente se encuentra hospitalizado en Praga.
Según explicaran oficiales de la policía checa, todas las cartas-bomba presentaban el mismo aspecto, lo que testimonia que fueron fabricadas por una misma persona, o grupo de personas.
Las cinco cartas-bomba desactivadas por las unidades especiales de la policía estaban dirigidas a antiguos miembros de la Junta Directiva de la empresa H-System, actualmente acusados de estafa.
El primero en recibir la carta-bomba fue el antiguo jefe de la empresa, Ladislav Tuma; al abrir el paquete notó dentro unos cables sospechosos y acto seguido lanzó el artefacto por la ventana y llamó a la policía, que desactivó la bomba.
A principios de los años 90 la empresa H-System inició un proyecto único para una sociedad que empezaba a dar sus primeros pasos hacia el capitalismo: la construcción a pagos de apartamentos y casas en los alrededores de la capital checa.
Cientos de ciudadanos creyeron que a través de H-System verían cumplido su gran sueño: tener casa propia. Sin embargo, el despertar fue muy duro y diferente. La empresa se declaró en quiebra. Las casas no se terminaron de construir y los clientes perdieron todo su dinero, en muchos casos se trató de los ahorros de varias generaciones.
Las víctimas nunca fueron indemnizadas y los culpables son procesados en libertad. Todo parece indicar que alguien ha tomado la ley en sus manos y la venganza es la gran protagonista en una de las mayores estafas de la historia reciente de la República Checa.
